Cine

Un mundo perfecto

Clint Eastwood en DVD

24 noviembre, 2005 01:00

Muchos no perdonan a Kevin Costner que cambiara su colección de estatuillas (Bailando con lobos) por una coleccion de cartas de admiradoras adolescentes (El guardaespaldas), pero los que aún le guardan el respeto debido seguramente le recuerdan como el desamparado prófugo de Un mundo perfecto, Butch Haynes, ese criminal con escrúpulos, perdedor nato y víctima infantil con quien la justicia -la biológica y la del sistema- nunca fue especialmente justa.

Clint Eastwood desarrolló la misma idea germinal que sostendría años después en Mystic River, una reflexión sobre cómo el abuso y maltrato de niños produce monstruos determinados o bien a repetir la historia que sufrieron o a tratar de resolverla con sus propias manos. Si ese era el camino redentorista y accidentado que tomaba el personaje de Tim Robbins en Mystic River, también es el que escoge Haynes, llevándose a un niño como rehén para huir de los Texas Ranger por los baldíos campos del estado tejano, pero también para mostrarle a ese niño hipersensible y medio huérfano que el mundo es mucho más grande de lo que su madre, testigo de Jehová, le da a entender. La conexión que se establece entre ambos supera toda expectativa.

Pisándoles los talones, un vehículo de campaña presidencial en el que Clint Eastwood (cediendo el protagonismo a Kostner) interpreta con su acostumbrada dignidad a un veterano ranger sobre el que cae el peso de una culpa pretérita, una joven criminóloga (Laura Dern) que enfrenta sus estudios psicológicos al olfato de un viejo sabueso, y un francotirador determinado a demostrar que el mundo, efectivamente, no es perfecto, aunque películas como ésta rocen la perfección.

Curiosidades
-En un principio, Butch Haynes era un fugitivo negro al que iba a dar vida Denzel Washington.
-La máscara del niño es del fantasma Casper, película en la que Clint Eastwood haría una divertida aparición dos años después.