Contracuerpo, de E. Chapero

Algo que caracteriza al clásico Festival de Cortos de Alcalá de Henares es que en su selección oficial cabe una amplia representación (este año 41 cortometrajes) de lo mejor del cine en corto realizado en España. La capacidad de innovación, la sensibilidad, la investigación y el talento, y por supuesto los rostros de nuestro cine futuro, bien pueden sondearse en las pantallas de Alcalá desde hoy y hasta el día 18. Esta clásica cita reivindicativa del cine nacional se ha propuesto sin embargo, alcanzada su 36 edición, alargar su sombra más allá de nuestras fronteras, para lo que ha creado una nueva sección competitiva. "Certamen Internacional de Cortometrajes" acogerá 36 cortos europeos de producción reciente que han sido presentados con éxito en otros festivales.

Hay que suponer que la opción de establecer dos secciones competitivas paralelas, en lugar de concentrarlas, no responde a una distinción de calidades (o sea, que una película española no pueda competir con una alemana, francesa o belga), pues de hecho la sección "Certamen Nacional" convoca cortos premiados en festivales del mundo, como Avatar, de Lluís Quíllez o La guerra, de Luiso Berdejo y Jorge C. Dorado.

Veteranos y debutantes
El principio general del certamen es el de seguir manteniendo el protagonismo de la creación cinematográfica española, y así agrupar las piezas de veteranos con las de debutantes. Entre los primeros estarán David Plannel (Banal), Juana Macías (Frozen Souls), Nacho Vigalondo (Choque), Jorge Torregrosa (Verano o los defectos de Andrés) o Toni Bestard (Equipajes), mientras que del lado de los noveles, concursarán entre otros Contracuerpo, de Eduardo Chapero-Jackson, o Con lengua, de Anna Rodríguez Costa. No faltarán los cortos realizados con técnicas de animación, como Hasta la muerte, de Juan Pérez-Fajardo o El viaje de Said, de Coke Rioboó.

Aunque gran parte de los cortos a concurso están colgados en la red para su visionado (un fenómeno que a estas alturas debería empezar a preocupar a los festivales, y no sólo de cortos), bien es cierto que la experiencia de verlos en la pantalla grande para la que han sido concebidos no tiene parangón. El sondeo de Alcine sobre el cine futuro español tendrá también su reflejo en la publicación del certamen, de título Miradas para un nuevo milenio.