Image: Muere Gordon Willis, director de fotografía de El Padrino

Image: Muere Gordon Willis, director de fotografía de El Padrino

Cine

Muere Gordon Willis, director de fotografía de El Padrino

19 mayo, 2014 02:00

Los ojos de Marlon Brando ocultos por el trabajo de Gordon Willis en El Padrino

Conocido como 'El príncipe de la oscuridad', Willis colaboró además en varias cintas de Woody Allen y en 2009 obtuvo un Oscar honorífico al conjunto de su carrera.

El nombre de Gordon Willis (Queens, 1931) probablemente no quedará inscrito en los anales de Hollywood con las letras doradas de las grandes estrellas pero su contribución al cine a partir de los años 70 tuvo un impacto trascendental en la configuración de una nueva manera de mirar en el séptimo arte. A él le corresponde el mérito de la fotografía de la saga de El Padrino que mediante luces cenitales mantenía en la penumbra el rostro de los actores, una manera de representar en la pantalla la oscuridad moral de unos personajes que han quedado grabados en la memoria de los espectadores.

El director de fotografía neoyorquino, responsable además de la imagen en ocho películas de Woody Allen, entre ellas Annie Hall y Manhanttan, y del clásico Todos los hombres del presidente de Alan J. Pakula, entre otras, ha fallecido a los 82 años, según informan publicaciones especializadas de Hollywood como Deadline y Variety. La Sociedad Americana de Cinematografía (ASC), a la que pertenecía, expresó hace unas horas su pésame en redes sociales por el fallecimiento de Willis, nominado en dos ocasiones a los Óscar y que en 2009 obtuvo uno honorífico al conjunto de su carrera.

"Es una pérdida monumental", señaló el presidente de la ASC, Richard Crudo. "Ha sido uno de los gigantes que cambió absolutamente la imagen de las películas. Nada que se hubiera rodado antes del Padrino I y II tenía ese aspecto", añadió. Su innovadora visión le valió el sobrenombre de 'Príncipe de la oscuridad', aunque en trabajos como Todos los hombres del presidente optara, en consonancia a un relato que en su representación del caso Watergate pretendía ser lo más veraz posible, por una fotografía casi cristalina.

"Hacer una fotografía bonita es fácil, es lo más fácil del mundo. Pero una fotografía que remata una imagen, de arriba a abajo, en coherencia con el contenido, eso es lo más hermoso (...). No se trata de poner la fotografía al frente de la historia, sino de que forme parte de ella", dijo Willis sobre su oficio. Siete de las películas en las que trabajó en el periodo 1971-1977 acumularon 39 nominaciones a los Oscar y ganaron 19 estatuillas.