J. A. Bayona con el Goya que recibió por Lo imposible
Las 12 nominaciones de Un monstruo viene a verme, muchas de ellas técnicas, no la sitúan como favorita en la fiesta del cine español. El hombre de las mil caras de Alberto Rodríguez podría partir con ventaja al tratar un tema de actualidad como la corrupción y contar con el favor de la crítica.
Sin embargo, es muy difícil prever qué película saldrá como triunfadora de la noche. La de Bayona tiene el hándicap de estar hablada en inglés y protagonizada por actores anglosajones, y cualquiera de sus contrincantes, Pedro Almodóvar (Julieta), Raúl Arévalo (Tarde para la ira), Rodrigo Sorogoyen (Que Dios nos perdone) y Alberto Rodríguez (El hombre de las mil caras) parten en igualdad de condiciones en una gala en la que Rodríguez podría ser el teórico favorito, pero en la que podría pasar cualquier cosa.
El hombre de las mil caras, de Alberto Rodríguez, con 11 nominaciones, tiene a su favor el tratar un tema de tanta actualidad como la corrupción, a un director de prestigio y el favor de la crítica. En su contra, podría jugar que el director ya arrasó hace dos años con La isla mínima. Donde parece que no tiene rival es en la categoría de mejor actor para Eduard Fernández, que ya obtuvo el premio en el Festival de San Sebastián y está insuperable en su caracterización como el oscuro y astuto agente doble (y triple) Paesa. Frente a él, un poderoso rival, Roberto Álamo, quien brilla en Que Dios nos perdone en su interpretación de un policía con problemas personales y de agresividad.
Que Dios nos perdone, tercera película dirigida por Rodrigo Sorogoyen, ha sido la sorpresa con sus nominaciones para mejor película, mejor director, mejor actor secundario (Javier Pereira), mejor guion original y actor protagonista. Cinco goyas de altura para una película que se medirá el cobre con el trabajo de otro joven director como el hasta ahora actor Raúl Arévalo, sin duda un hombre de talento, que ha debutado con gran éxito en la dirección con Tarde para la ira. La Academia le ha reconocido el logro con 11 nominaciones.
Muy celebrada por la crítica, Tarde para la ira es un potente thriller sobre la venganza en el que Arévalo demuestra buen pulso para el género y trazas autorales. Arévalo parece el favorito claro en la categoría de mejor director novel, en la que también destacan los trabajos de Marc Creuhet (El rey tuerto), Salvador Calvo (Los últimos de Filipinas) y Nely Reguera (María y los demás) en un año en el que brillan con luz propia los debutantes.
Emma Suárez es protagonista por partida doble por personajes en los que sufre por la ausencia del hijo. Está nominada por su papel de una traumatizada mujer en la intensa Julieta de Almodóvar y como secundaria por su interpretación de otra madre doliente, la de La próxima piel de Isaki Lacuesta, sin duda la gran, e injustamente, olvidada por las nominaciones. Cabe preguntarse, una vez más, por la querencia eterna de la Academia por ensalzar a películas con grandes distribuidoras y el aparato promocional de las televisiones y olvidarse sistemáticamente de producciones más indie. En cualquier caso, parece, una vez más que el gran perjudicado es Almodóvar que acapara "solo" siete nominaciones aunque Julieta, seleccionada, eso sí, como representante española de los Oscar, bien podría dar la sorpresa y salir triunfadora. Es un bello filme.
Como mejor actriz protagonista, Suárez rivaliza con grandes actrices patrias. Penélope Cruz le da a La reina de España una de sus pocas nominaciones y Carmen Machi no ha recibido más que alabanzas por su papel como prostituta en La puerta abierta. El premio podría ser para Bárbara Lennie, que está espléndida en su interpretación de una treintañera desorientada en María y los demás.
@juansarda