Este viernes se estrena en cines la película Borderlands. Dirigida por Eli Roth (El justiciero, Black friday) y con un elenco admirable formado por estrellas como Cate Blanchett, Kevin Hart o Jamie Lee Curtis, es la última en sumarse a una larga lista de filmes que, con cada vez más frecuencia, están inspirados en franquicias de videojuegos.
Este fenómeno, cada vez más común tanto en la gran pantalla como en series de televisión, tiene causas de diferente naturaleza. Por un lado se podría justificar con el hecho de que la industria de los videojuegos cada vez produce mundos más ricos en detalles, con unas narrativas más elaboradas y complejas que ya comienzan a competir de tú a tú con las de otros lenguajes audiovisuales como el fílmico.
De esto último serían ejemplos claros las series de televisión postapocalípticas The last of us —cuya segunda parte está prevista para el próximo año— y, más recientemente, Fallout.
Borderlands, ambientada en un planeta, Pandora, que bien podría ser la Tierra baldía sobre la que cantaran los versos de T.S. Elliot, se nutre de la doble tendencia de adaptaciones a la pantalla de videojuegos enmarcados, además, en auténticos eriales que rechazan cualquier forma de vida tal y como la conocemos.
La sofisticación narrativa, sin embargo, no explica todo el conjunto del fenómeno. Varias de las adaptaciones más éxitosas que se han visto estos últimos cinco años provienen de producciones del mundo del videojuego caracterizadas por contar con historias simples que sirven como mera excusa para el desarrollo de la acción jugable.
Son, sobre todo, los casos de las millonarias franquicias de Nintendo, Pokémon y Super Mario, cuyo traslado a la gran pantalla en las películas Detective Pikachu y Super Mario Bros.: la película cosechó en ambos casos un gran éxito en taquilla.
Las mejoras técnicas del cine digital podrían explicar el éxito actual de las adaptaciones de este tipo que, aunque se intentaran en el pasado, no lograban tener una calidad suficiente, como se pudo comprobar en el batacazo de Super Mario Bros (1993).
Sea como fuere, lo cierto es que cada vez el repertorio de adaptaciones que provienen del mundo del videojuego es cada vez más variado y de una calidad más pulida. Estas son algunas de las transformaciones a la gran pantalla más llamativas.
Five nights at Freddy's (2023)
Mike Schmidt es un joven que está de enhorabuena. Ha conseguido un trabajo que, a priori, parece fácil. Tan solo se trata de ser vigilante de una pizzeria por la noche. En el contrato, sin embargo, no se le avisa que las mascotas del local, unos animatrones muy simpáticos durante el día, se vuelven unos homicidas en cuanto bajan el sol y la persiana del restaurante.
El videojuego original del desarrollador independiente Scott Cawthon fue lanzado en 2014 para PC, con versiones posteriores para móviles y consolas. La adaptación, dirigida por Emma Tammi (A la intemperie) se estrenó en octubre de 2023. Josh Hutcherson (Los juegos del hambre) es el encargado de vigilar el local y, a la vez, huir de aquellos animales robotizados en el papel de Mike Schmidt.
Gran Turismo (2023)
El caso de la película de la reconocida saga de videojuegos de carreras es diferente. En esta ocasión, la franquicia distribuida por Sony sirve como hilo conductor de la trama del filme.
La película Gran Turismo, dirigida por Neill Blomkamp (Elysium, Chappy) cuenta la historia real de Jann Mardenborough, un joven de Cardiff que se vuelve elegible para una escuela de competición automobilística gracias a sus habilidades y logros en el videojuego.
Super Mario Bros.: La película (2023)
El descalabro que sufrió en 1993 la primera iniciativa de adaptación de la icónica franquicia de Nintendo hacía augurar lo peor para la película dirigida por Aaron Horvath (Teen Titans Go! to the Movies) y Michael Jelenic (Las aventuras de Jackie Chan).
Sin embargo, resultó superar todas las expectativas tanto en taquilla como en la calidad general del filme. La película fue uno de los éxitos de aquella temporada, con una historia divertida y una animación impecable.
Pokémon: Detective Pikachu (2019)
Algo similar ocurrió antes con la otra franquicia de referencia de la empresa japonesa de videojuegos. Si bien Pokémon cuenta con una inabarcable lista de películas que sirven, además, como spin-off de la serie de televisión aparecieron muchos recelos con respecto al desarrollo de una película que, en lugar de la animación, optara por la imagen real.
Pese a ello, y aunque no logró alcanzar ni la taquilla ni la calidad de la película del fontanero italiano, la obra dirigida por Rob Letterman (Jurassic World: El reino caído) fue un trabajo generalmente solvente con un diseño admirable de las icónicas criaturas.
The last of us (2023)
La adaptación del videojuego de Naughty Dog fue uno de los éxitos más sonados del pasado año en la plataforma HBO. Gran parte del mérito corre a cargo de la formidable historia original de la obra que se lanzó en 2013 para PlayStation 3.
Las sensacionales actuaciones de Pedro Pascal como Joel Miller y Bella Ramsey como Ellie, además del tremendo nivel general en el resto de aspectos de la producción, son las otras firmes columnas sobre las que se sostiene la que es indiscutiblemente la mejor adaptación de un videojuego hasta la fecha.
Fallout (2024)
Fallout era a todas luces una franquicia de videojuegos que, aunque atractiva, podía llegar a ser un quebradero de cabeza a la hora de trasladar a una serie o película. Para empezar, el imaginario original en el que se basa la saga que es actualmente propiedad de Bethesda Softworks está atomizado en varias entregas y cuenta con elementos difíciles de reconciliar entre sí en una sola producción.
Además, al contrario de lo que ocurre con The last of us, ninguno de los videojuegos de la franquicia cuenta con una narrativa especialmente cautivadora. Su atractivo principal, sin embargo, se centra en la increíble inmersión que se logra por la suma de partes que normalmente no tienen un papel tan importante, como es el caso de la interfaz del juego, difícilmente trasladable a otros lenguajes audiovisuales.
Aún y todo, el resultado de la obra dirigida por Lisa Joy y Jonathan Nolan (directores también de la aclamada serie de la HBO, Westworld) para Amazon Prime es una historia fresca y dinámica que sabe recoger los elementos del imaginario de los videojuegos que más le conviene y conjugarlos en una obra sugerente y rica en detalles.