Björk, cabeza de cartel del Primavera Sound
El sol comienza a despuntar entre las nubes del reciente invierno y los aficionados a la música cuentan los días para las grandes citas del pop rock del verano: Primavera Sound, Sónar y Festival Internacional de Benicássim, por orden de llegada. La popularidad de estos tres eventos de reputación mundial han convertido a nuestro país en una de las plazas más calientes del panorama mundial y este año la ristra de grandes nombres que pasarán por alguno de ellos vuelve a ser espectacular. El Primavera Sound, que se celebra del jueves 31 de mayo al domingo 2 de junio en el Parc del Fòrum de Barcelona tiene como cabezas de cartel a clásicos como Björk, Wilco o The Cure junto a bandas en pleno apogeo como como Wild Beasts o Beach House. El Sónar (del 14 al 16 de junio) apuesta por la rutilante Lana del Rey, los sudafricanos Die Antwoord, James Murphy o el hip hop de The Roots. El FIB (del 12 al 15 de julio), por su parte, se marca un tanto al traer a Bob Dylan, reunir a The Stones Roses o fenómenos como David Guetta. Por partes.El Primavera Sound se ha convertido en una cita internacional de primera magnitud consiguiendo lo más difícil, en la estela del Sónar, tener un público fiel que va al certamen tanto a ver a algunos de sus artistas favoritos como a dejarse guiar por el criterio de los programadores. Björk ejerce como cabeza de cartel, recién publicado su último disco, Biophilia, en el que experimenta con las posibilidades del Ipad como instrumento musical. The Cure son uno de los mejores grupos de todos los tiempos y verlos en el Primavera Sound va a ser sin duda uno de los acontecimientos culturales de este año en nuestro país. La banda de Robert Smith sigue siendo, casi 30 años después, un referente con su pop gótico y clásicos como el pionero Boys Don't Cry o Disintegration. Celebran los 20 años de Wish, uno de sus álbumes más emblemáticos, en el que suena el himno Friday I'm In Love. Wilco, la banda fundamental del rock contemporáneo, completa el poderoso trío que encabeza esta edición. Los de Jeff Tweedy son siempre sensacionales.
La programación del Primavera oscila, como es habitual, entre nombres clásicos, grupos de moda y apuestas del propio festival. Regresan a Barcelona bandas como Yo La Tengo, grandes renovadores del rock intelectual; Shellac, el proyecto ruidista de Steve Albini; Franz Ferdinand, que no tienen disco nuevo desde 2009 y podrían presentar en Barcelona su esperadísimo nuevo álbum o The XX, que marcaron ese mismo año con su celebradísimo debut y probablemente dejarán oír sus nuevos temas tras el adelanto de Navidad. Y más clásicos: Marianne Faithfull, Mudhoney o Dominique A. Y bandas pujantes como los psciodélicos Wild Beasts, el lírico Jeremy Jay o la electrónica sensible de Beach House. En el apartado español, destacan nombres como Cuchillo con su pop rock delicado y experimental o Joe Crespúsculo, trovador punk, y Atleta, nuevo proyecto de Jaime Pantaleón, ex 12twelve, donde sigue experimentando en el rock.
El FIB dará muchos titulares cuando el eterno Bob Dylan salte al escenario. Considerado sin discusión uno de los mejores músicos de todos los tiempos, es una nueva oportunidad para ver una leyenda vida. The Stone Roses revolucionaron la música con su álbum homónimo de 1989 y fueron los precursores de la apoteosis brit pop de la siguiente década. Se han prodigado poco desde su reunión el año pasado y su presencia en Benicássim podría ser el estreno de su esperado tercer álbum y un nuevo amanecer para esta mítica banda. Otros de Manchester que nunca pasan de moda, New Order, estarán en Benicàssim haciendo doblete con Sonar, con su pop electrónico inmarchitable. Otro veterano, Noel Gallagher, que acaba de lanzar su primer disco con su proyecto High flying Birds en el que es fiel su pop británico de corte clásico. Y no hay que perderse ni el hip hop londinense del gran Dizee Rascal o el house vitamínico del DJ más famoso del mundo: David Guetta. En la letra pequeña del cartel, grandes nombres como Crystal Castles con su peculiar mezcla entre ruidismo electrónico y sonidos bailables; el rock oscuro y discotequero de los extraordinarios The Horrors o el talento de los españoles Klaus and Kinski, con sus dosis de ironía pop, o las melodías pegadizas y brillantes de La casa azul.
El Sónar es probablemente el Festival de música electrónica más importate del mundo y buena prueba de ello es su multiplicación en sedes como Ciudad del Cabo, Sao Paulo y Tokio. El programa de este año viene marcado por la visita a España de Lana del Rey, la neoyorquina es la sensación mundial del momento gracias a su primer álbum, Born To Die, con su pop melancólico ultraproducido de gran calado emocional. Die Antwoord están arrasando las pistas de baile de todo el mundo con su electrónica desacomplejada y punki en la que el electro se mezcla con un hip hop lúdico de toques ochenteros. Son los hacedores de la omnipresente Enter The Ninja. James Murphy es un mito gracias a proyectos como DFA y LCD Soundystem con los que dio un definitivo empuje a la música dance capaz de alcanzar profundidades abisales del alma. Regresa a los platos para ofrecer una combinación entre funk y disco. Los británicos Hot Chip son los creadores de gemas electropop como Over and Over o One Life Stand y ofrecen siempre motivos para la diversión inteligente. James Blake es el trovador electrónico sensible por excelencia y sus crepitantes melodías brillarán en la próxima edición del Sónar.