Un momento de la nueva producción de La Traviata que dirige escénicamente Susana Gómez.
En la Quincena Donostiarra siempre ha sido muy potente la parcela sinfónica, en la que se han dado la mano algunos de los mejores conjuntos orquestales europeos. Lo sigue siendo en la algo recortada edición de este año, que se desarrolla en el Auditorio Kursaal de San Sebastián del 1 al 31 de agosto. Aparece en lugar preferente Valery Gergiev, que con su falange del Teatro Mariinsky hace dos programas con Wagner, Tchaikovsky, Brahms, Mozart y Shostakóvich (Sinfonía n° 13, con el Coro Easo). De alto interés son los dos conciertos de la Orquesta de la Radio de Frankfurt dirigida por Paavo Järvi, un maestro de muy refinado estilo y lógicos criterios musicales, que sitúa en atriles la Tercera de Bruckner y la Cuarta de Nielsen.
La Orquesta de Cámara de Escocia actúa a las órdenes de un joven valor, ya muy acreditado, Robin Ticciati, que cuenta con el Orfeón Donostiarra para el Réquiem de Fauré, que se une, en dos conciertos, a obras de Beethoven, Schönberg, Berlioz y Mendelssohn. Víctor Pablo Pérez dirige un plato fuerte, la Novena de Bruckner, a la Sinfónica de Galicia, acompaña a Ainhoa Arteta en los Cuatro últimos lieder de Strauss y preside la monumental Resurrección de Mahler, asimismo con el Orfeón. Por su parte, la Sinfónica de Euskadi, dirigida por Carlo Rizzi, ofrece la Missa in tempore belli de Haydn. La JONDE y George Pehlivanian interpretan El amor brujo de Falla y Le sacre de Stravinsky.
La ópera de este año es La traviata, en coproducción con El Escorial (en cuyo Festival de Verano se estrena esta misma tarde), Oviedo y Baluarte de Pamplona. El reparto es de altura y casi íntegramente español -José Bros, Ángel Ódena, Pilar Vázquez, Albert Casals, Fernando Latorre, Alfonso Echeverría, Marta Ubieta… Ya podría aprender Gerard Mortier-, con la salvedad de la interesante Violetta de Desirée Rancatore. Pietro Rizzo está en el foso, en este caso con la Sinfónica de Euskadi, y Susana Gómez, con muchas cosas nuevas que decir, es la directora de escena.
Destaca asimismo el recital de la soprano lírico-coloratura rusa Julia Lezhneva, así como las apetitosas ofertas de música antigua: Enrico Cassazza, Conductus Ensemble, Carlos Mena, Al Ayre Español... La producción contemporánea está bien representada por el Cuarteto Diotima, el Ensemble Kuraia, Sigma Project, el percusionista Sisco Aparacii... Se evocará la memoria de John Cage y se tocará música nuestra y de hoy creada por Alberto Posadas, Jesús Torres, Hèctor Parra y Luis de Pablo, entre otros.