Escenarios

Halffter remata el curso con Mahler

20 junio, 2014 02:00

Pedro Halffter es director serio, buen trabajador, de técnica gestual no muy variada pero clara y eficaz, que traduce un pensamiento bien orientado, cada vez más elocuente, aunque todavía sujeto a ciertas rigideces, y que sigue una tradición centroeuropea que ha mamado desde muy joven. Su formación es muy sólida. Y ha hecho asimismo sus armas con fortuna en el campo de la creación. Lo curioso es que esos dones no siempre trascienden, en parte por su carácter severo, incluso adusto, y en parte por una innata timidez, que le impide tener una fácil comunicación con los instrumentistas de las dos formaciones de las que es titular, la Filarmónica de Gran Canaria y la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla (ROSS). Si nos referimos exclusivamente a su labor en la capital andaluza, en la que es igualmente responsable artístico del Teatro de la Maestranza, su actuación ha sido, tras la desconfianza que causó su nombramiento a dedo y las influencias que lo motivaron, generalmente positiva.

Su técnica y la capacidad de profundización en los pentagramas han ido desarrollándose al tiempo que adoptaba muy loables hábitos programadores, con inclusión de óperas inusuales, y abría las compuertas a proyectos diseñados temáticamente. Es ejemplo la configuración de la temporada que ahora termina. Gusta el director de dar título a sus conciertos y a los del resto de la singladura. En la presente se han interpretado ya bajo sus órdenes las Sinfonías n° 1 (Mahler Heroico), n° 4 (Mahler Celestial), n° 5 (Mahler y Alma), n° 7 (Mahler Nocturno). La n° 9 (Mahler Póstumo) cerrará el ciclo los días 26 y 27. Aunque podría ser ésta la última vez que estuviera en ese podio, pues su contrato vence en el cercano julio. Por distintas razones, se ha producido un descontento en el seno de la orquesta, que ha estado a punto de culminar en una huelga que habría impedido el estreno de la producción de la Fura de El crepúsculo de los dioses.

Las cuatro administraciones competentes no han andado listas. Quizá un primer error fue asignarle al titular, bien es verdad que por un triple trabajo, unos emolumentos que parecían excesivamente elevados. Pero, en fin, lo relevante, es que los aficionados sevillanos podrán asistir, si la situación no empeora todavía más de aquí a entonces, a lo que esperamos sea una solvente interpretación de la postrera obra maestra de Gustav Mahler. Que así sea.