Les Arts Florissants
No hay duda de que Les Arts Florissants es uno de los conjuntos más conocidos y apreciados en nuestro país dentro de la parcela de la música renacentista, barroca y clásica. Con su fundador, el norteamericano William Christie, y sus agrupaciones corales e instrumentales, lo hemos visto y escuchado en las más variadas propuestas. Ahora una selección de las voces más afinadas van actuar en la sesión del próximo lunes día 7 en el Universo Barroco del CNDM. Pero no será Christie quien se sitúe al frente, sino su colaborador desde hace años Paul Agnew (Glasgow, 1964), tenor él mismo, especializado, con su timbre claro y ligero, en el barroco.Hoy Agnew se dedica sobre todo a dirigir, y con provecho, no sólo pequeños conjunto o coros, sino también orquestas. Aunque es su conexión con la voz lo que lo caracteriza. Lleva algún tiempo estudiando, interpretando y grabando con Les Arts Florissants los ciclo completos de los madrigales de Monteverdi, de quien se ha convertido en un eminente conocedor. De los seis libros escritos a cinco voces tendremos ocasión de escuchar una amplia selección de los números I, II y III. Obras de 1587, 1590 y 1592. Páginas maravillosas, que exploran y recrean las emociones más puras e íntimas; los dolores más acerbos; las penas y nostalgias del amor; las lamentaciones de la muerte.
Sólo realizando con limpieza el stilo concitato, el canto nervioso y ágil, manejando con habilidad la sprezzatura, es decir, dando aire y variedad al ritmo, es posible calar en lo más hondo de estas piezas en las que resplandece la fantasía del compositor de Cremona. Melodía, recitado, sutiles combinaciones polifónicas nos envuelven en un manto de exquisitas sonoridades en las que deben seguirse estas reglas áureas: "La voz deberá ser clara, la dicción perfecta. En ningún momento se permitirán ornamentos". Los intérpretes anunciados las mantienen.