El Ballet Contemporáneo de Burgos representando Ésta, no es una historia de mujeres

La villa medieval celebra la XX edición de la Feria de Teatro de Castilla y León que este año contará con 44 compañías y 12 estrenos y reserva a Portugal su apartado internacional.

Un año más, y ya van veinte, las calles de Ciudad Rodrigo se preparan para acoger uno de los eventos más importantes que tienen lugar en la villa mirobrigense, la Feria de Teatro de Castilla y León, que en esta edición celebra sus dos décadas de andadura como punto de encuentro entre directores, intérpretes, distribuidores, productores, programadores, gestores culturales y público. "La feria llega como un proyecto en plena madurez, que ya se ha mostrado como sólido y rentable", asegura su director, Manuel González, que reconoce que "cada año es un nuevo reto, y no recuerdo ningún año fácil, pero afrontamos la vigésima edición con responsabilidad y con la confianza de cumplir nuestra función como facilitadores de mercado".

Con este espíritu, la localidad salmantina vuelve a convertirse en referente de las artes escénicas de la península en un encuentro que, una vez más, volverá a reunir una programación ecléctica y plural en la que convergerán los espectáculos de sala y de calle, la danza, el circo, los títeres y la improvisación, el teatro gestual, visual, musical e infantil o la fusión de géneros. A esta variedad de formatos se une la de los temas tratados. Tanto las compañías emergentes como las consolidadas contribuyen con sus trabajos a reflejar distintos aspectos de la realidad y abordan asuntos de corte social, como la igualdad de oportunidades y de género, el acoso escolar, la corrupción, la soledad de los mayores o el desarraigo. "Creo que se ha conseguido situar nuestra comunidad en los circuitos nacionales de artes escénicas con un proyecto singular y de referencia, así como colocar a una pequeña localidad como Ciudad Rodrigo en primera línea", valora González. Desde la tarde de este 22 hasta el 26 de agosto, 44 compañías ofrecerán 52 funciones, 12 de ellas estrenos, repartidos en más de diez escenarios de la villa.

El espectáculo elegido para inaugurar esta edición de la feria se circunscribe en otro aniversario, en este caso de los 25 años. A partir de esta tarde abrirá fuego el Ballet Contemporáneo de Burgos, que celebra su vigesimoquinto aniversario con Ésta, no es una historia de mujeres. La veterana formación será una de 14 seleccionadas de Castilla y León, una amplia representación de la escena regional que supone un tercio del total de las compañías programadas. "La presencia de compañías de nuestra comunidad siempre es intensa pues este es el escaparate fundamental para exhibir nuestras producciones", explica González. Debutan en la feria compañías como La Pequeña Victoria Cen, con Gigante, o Las Pituister, que estrenará en Ciudad Rodrigo Las emprendedoras. Completan este apartado de agrupaciones castellanoleonesas Teloncillo (El jardín musical), Azar (Sancho en Barataria), Títeres de María Parrato (El viejo y el mar) o Nao d'Amores (Europa), entre otras.

Feria del Occidente

Más allá de su propia comunidad, la feria se erige como referente escénico del occidente peninsular, como refrenda la presencia de cuatro compañías extremeñas, entre las que destaca Z Teatro con Workers 1929; dos compañías gallegas: Baobab y Traspediante, y tres andaluzas.

Todo ello se une a la habitual representación de la escena lusa. En esta ocasión, el capítulo dedicado a mostrar trabajos realizados fuera de España ha sido reservado a Portugal, que participará en el encuentro con Imagini, de Passos e Compassos; Balbucia, de Animateatro; Mira!, Mira!, Miró, mirando!, de Teatro Art'Imagen, y Lullaby, de Godot. "En veinte ediciones van a ser más de sesenta los espectáculos lusos mostrados y centenares los profesionales de Portugal que se acercan hasta la feria, que sin duda es muy importante para su sector", apunta González. "Este año hemos querido reservar la programación internacional a las producciones portuguesas, como seña de identidad y gesto reivindicativo de la importancia que tiene la Feria de Teatro de Castilla y León como Feria del Occidente".

Lullabay, de Godot , una de las compañías portuguesas participantes

El propósito de la feria de ayudar en la promoción de nuevos espectáculos se plasma en una programación en la que la mitad de los trabajos son de este mismo año y el 25% se estrenarán en Ciudad Rodrigo. De los 12 espectáculos que se presentan por primera vez, cuatro son estrenos absolutos, tres de las cuatro propuestas portuguesas llegarán como estrenos nacionales, al igual que otras obras como Historia de una semilla, de La Maquiné Teatro y LunaticusCircus, de la compañía vasca Teatro Paraíso. "Una de las prioridades de la feria es mostrar a los profesionales inscritos espectáculos que aún no han tenido ocasión de ver en otros lugares, presentarles novedad, y una forma de ofrecérselo es con propuestas de estreno, lo cual es también muy arriesgado, pues si un montaje no está maduro puede ser contraproducente. Pero creo que el riesgo forma también parte de nuestras responsabilidades, y hay que apostar por las compañías valientes que proponen estrenar en una feria", defiende el director. Además, también habrá 13 estrenos de ámbito regional como Tartufo, de Venezia Teatro; La Calderona, de La Calderona Prod./Yllana; Nada, de Ultramarinos de Lucas o Jardines, de Impromadrid.

Teatro por todas partes

Pero más allá de mantener el formato habitual, esta no es edición más, y se nota. Ya desde el pasado fin de semana, la Feria de Teatro de Castilla y León ha organizado una novedosa y original iniciativa para celebrar sus veinte años de historia. Se trata de Teatro por todas partes, un programa de representaciones escénicas de pequeño formato, para un aforo reducido (20 personas), de corta duración (máximo 20 minutos) y en 20 lugares diferentes de la localidad, desde viviendas particulares (ofrecidas por los propios espectadores en colaboración con la Asociación de Amigos del Teatro de Ciudad Rodrigo) hasta espacios sociales singulares.

Un momento de Historia de una semilla, de La Maquiné Teatro

Además, la celebración del vigésimo aniversario del certamen servirá también para echar la vista atrás con dos exposiciones retrospectivas. La titulada Los lugares de la Feria está concebida como una instalación fotográfica al aire libre y mostrará una selección de imágenes de espectáculos programados durante los últimos diecinueve años. La segunda exposición tendrá lugar en la Casa Municipal de Cultura y se centrará en una de las actividades paralelas más significativas del encuentro escénico, el programa de animación infantil Divierteatro, un conjunto de propuestas destinadas a menores de entre 6 y 16 años. Aparte de la celebración propia de los veinte años, el encuentro se suma a la conmemoración de otras efemérides. El bicentenario de Zorrilla estará presente con No es otro estúpido espectáculo romántico, de Valquiria; y el quinto centenario de la llegada de Carlos V a España, con Carlos V, cartas al emperador, de Teatro del Navegante.

Mirando al futuro

Un vigésimo aniversario que, más allá de lo festivo y lo lúdico, también es utilizado por su director para valorar el camino recorrido y lo que queda por andar. González se muestra satisfecho sobre estas dos décadas, especialmente por su papel de escaparate para jóvenes compañías y por el nivel de público, que supera los 30.000 asistentes, tres veces la población de Ciudad Rodrigo. "Estamos satisfechos de, en una localidad pequeña y con un solo espacio escénico estable, el Teatro Nuevo Fernando Arrabal, haber conseguido armar un evento como este. Desde la periferia, desde lo rural, y con equipos de trabajo pequeños, pero compactos, también se pueden construir proyectos importantes".

Sin embargo, siempre hay aristas que pulir, y el director asegura que tras veinte años de rodaje, todavía "quedan muchas cosas por hacer, pues a pesar de la longevidad es muy difícil consolidar un presupuesto que permita hacer una planificación del trabajo a tres o cinco años vista. No pretendemos crecer, sino cada vez hacer las cosas mejor, con más calidad en la medida de nuestras posibilidades", reconoce. Sin embargo, demuestra la ilusión de que "para los próximos años espero que podamos seducir a las instituciones para conseguir en Ciudad Rodrigo un espacio estable para la exhibición y creación artística, que sería necesario para la feria, pero también imprescindible para toda la población durante todo el año". Por de pronto, a los espectadores solo nos queda disfrutar de una amplia y variada oferta escénica cuyo telón caerá definitivamente el 26 de agosto.