Image: Gente de Zona y el año de la música latina

Image: Gente de Zona y el año de la música latina

Escenarios

Gente de Zona y el año de la música latina

2 enero, 2019 01:00

Gente de Zona y Moonlight Benjamin

Este ha sido el año en el que la música latina, reggeatón incluido, ha vivido un gran reconocimiento internacional. Son numerosos los artistas de Suramérica que están revolucionando los sonidos tradicionales introduciendo influencias del hip hop y la música urbana sin perder su esencia. En 2018 The Guardian ha dicho que Maluma "es mucho más que una cara bonita" y en junio veremos a J. Balvin en el Primavera Sound, emblema de la ortodoxia.

Destacamos En letra de otro, del grupo cubano Gente de Zona, un concierto especial en el que repasan algunos clásicos del continente aportándoles su estilo. Y no nos olvidemos de los colombianos Piso 21, reyes de la canción romántica con toque urbano, y el propio Maluma. Como siempre, gran vitalidad africana con los nuevos discos de Seun Kuti, hijo del mítico Fela, que propaga la labor musical y política de su padre con los míticos Egypt 80. Brilla el rock del desierto de los argelinos Imarhan y la fuerza de la cantante maliense Fautomata Diawara. Y desde Haití, Moonlight Benjamin nos regala un disco musculoso. Tiempo de disfrutar de ritmos orientales con el gran talento de la turca Gay Su Akyol y la emoción de los palestinos Le Trio Jourban. Y desde Houston, Texas, la electrizante fusión de Khruangbin.

MEJOR DISCO DEL AÑO

Gente de Zona: En letra de otro. Cuba

La música cubana vivió un gran momento de reconocimiento hace veinte años con Buena Vista Social Club (1997) que sigue siendo el disco más exitoso de la historia del world music. Las cosas han cambiado en una isla que siempre fue famosa por su ritmo y uno de los mejores exponentes son Gente de Zona, grupo fundado por Alexander Delgado en 2000 que ahora funciona como dúo con Randy Malcolm, que vivió un gran éxito con el hit La gozadera, con Marc Anthony, hace tres años y ahora está triunfando con otro single, Te duele. Gente de Zona nos propone en este disco un repaso a los grandes clásicos de la música latina que van de 'Si tú no estás', del venezolano Franco de Vita a la mismísima "bamba" de Richie Valens.




POR ORDEN ALFABÉTICO

Fatoumata Diawara: Fenfo. Costa de Marfil

Pocas artistas africanas resultan más agradecidas al oído occidental que la cantante y compositora de Costa de Marfil afincada en Francia Fatoumata Diawara (1982), quien comenzó a grabar discos a los 15 años y hoy es una de las voces más importantes del continente. El sonido de Diawara se inspira en la música wassoulou, propia de una región del oeste de África que comprende un área con territorio de Mali, Guinea y Costa de Marfil con influencias del jazz y el soul. Considerada como una de las raíces del blues, la música wassoulou ha pervivido a través de los siglos con los cantos de las mujeres y nos conmueve con su fuerza lírica y capacidad dramática con un sonido marcado por el soku, una especie de banjo, o el bolon, un arpa de cuatro cuerdas.

Gaye Su Akyol: Istikrarlh Hayal Hakikattir. Turquía

Sensacional disco de la cantante turca Gaye Su Akyol (Estambul, 1985), máxima exponente hoy mismo de esa célebre escena musical que crece a orillas del Bósforo, en Estambul, y que retrató Fatih Akin en la película Crossing the Bridge en 2005. Artista aguerrida, Su Akyol combina en su música las influencias del punk y el grunge (es gran admiradora de Kurt Cobain) con los ritmos orientales creando una fusión apasionante. El título del disco significa "una fantasía consistente es una realidad" y en la canción homónima dice pletórica "la realidad es rock and roll". En un momento en el que el país otomano vive una gravísima regresión de las libertades y la democracia con la revolución conservadora de Erdogan, la voz de Akyol, desgarrada a veces, furiosa otras, suena con fuerza en un álbum que a veces recuerda al mismísimo Jimi Hendrix.

Imarhan: Temet (City Slang). Argelia

Imarhan significa en Touareg "aquellos que se aman, se codean y son sinceros" y son un sexteto de Tamanrasset, una ciudad del sur de Argelia en el corazón del Sáhara. Hace un par de años, la banda obtuvo un gran éxito internacional con un disco homónimo fabuloso que los convirtió en uno de los máximos exponentes de ese "rock del desierto" que representan otras bandas como los célebres Tinariwen. Evolución de la música tradicional tuareg, se introducen elementos del rock y el blues dando lugar a un sonido absolutamente seductor. Combinando guitarras y una percusión asombrosa, revive el espíritu de África pero también la fuerza de los Doors.

Khruangbin: Con todo el mundo. Estados Unidos

Banda de Houston (Texas) formada por el bajo de Laura Lee, Mark Speer a la guitarra y Donald Johnson en la batería, Khruangbin debutaron hace tres años con el disco The Universe Smiles Upon You en el que homenajeaban a la música asiática y tailandesa. Ahora le toca el turno a la música española y de Oriente Medio con este sensacional Con todo el mundo, en el que convencen con una música instrumental en la que introducen elementos del country, el blues o incluso el funk. Más Oriente Medio que España, logran una peculiar fusión de influencias en la eléctrica María también o una curiosa mezcla entre lounge y aires orientales en Rules.

Le Trio Joubran: The Long March. Palestina

Hacía siete años que Le Trio Jourban, formado por tres hermanos palestinos (Samir, Wissam y Adnan Joubran) afincados en París y virtuosos del laúd, no lanzaban música nueva y The Long March ('la larga marcha') nos maravilla con su mezcla entre delicadeza y emoción. Máximos exponentes de la música árabe en el mundo, la producción corre a cargo de Renauld Letang (quien ha trabajado con Björk o Manu Chao) y el laúd se acompaña de sintetizadores, piano y cuerda. Hay momentos de una belleza sublime, como esa The Trees We Wear, en la que la guitarra nos recuerda a Paco de Lucía, y colaboraciones de postín como la de Roger Waters, de Pink Floyd, muy comprometido con la causa palestina, en la dramática Carry the Earth.

Maluma: F.A.M.E.. Colombia

Maluma es tan famoso y popular que es fácil mirarlo de reojo. F.A.M.E. es un gran disco de música latina en el que José Luis Londoño Arias (Medellín, 1994) muestra una gran capacidad para realizar canciones en las que los ritmos tradicionales se fusionan con el hip hop y el trap. Hay grandes canciones como Felices los 4 en versión doble, reggaetonera y salsera con el gran Marc Anthony y momentos más cercanos a la cumbia como La Ex, con Jason Derulo. Apasionado y desatadamente romántico, Maluma es un artista capaz de levantar a un muerto pero también puede emocionarnos como en Marinero, una bonita balada de latin pop.

Moonlight Benjamin: Siltane. Haití

Hace cuatro años Arcade Fire dieron brillo a los ritmos haitianos con su álbum Reflektor. El pequeño (y paupérrimo) país caribeño muestra su mejor faceta con el tercer disco de la artista Moonlight Benjamin, quien se dedica a fusionar los ritmos del vudú haitiano con el rock y el blues con vigorosos resultados. La rítmica recuerda un poco al "blues del desierto" de Imarhan o Tinawiren pero Siltane es más rockera y su música tiene una suerte de contundencia casi cortante como puede comprobarse en la canción que da título al disco. Hay otros momentos de una gran fuerza, como Tan malouk en la que puede percibirse la rabia de la artista y otros de una gran emoción como el cierre, Mèt agwe.

Piso 21: Ubuntu. Colombia

Muy populares en Colombia y también en nuestro país, Piso 21 es un grupo de Medellín formado por Pablo Mejia, Juan David Huertas, David Escobar y Juan David Castaño que triunfan con una especie de regagetón popero y disfrutable. Ubuntu es su segundo álbum de estudio y de sus inicios románticos avanzan hacia un sonido más urbano y trapero aunque sin perder su esencia de grupo que habla sobre chicas por las que padecen. Hay buenos singles como el hit Puntos suspensivos, que podría haber firmado Juanes, o la hiperexitosa Déjala que vuelva, con Manuel Turizo, una modélica canción de la nueva música latina.

Seun Kuti and Egypt 80: Black Times (Strut) Nigeria

Pocos personajes hay más importantes en la música del siglo XX como Fela Kuti, músico y activista nigeriano que pagó un alto precio por su oposición a la dictadura de su país y deslumbró al mundo con su electrizante fusión entre música africana y el jazz de vanguardia de la época en lo que se dio a conocer como afrobeat. El espíritu del artista sigue vivo en su hijo Seun, que sigue liderando la banda Egypt 80. Siete años después del último álbum del combo, Black Times es una reivindicación del espíritu revolucionario de Fela con unos temas de afrobeat de gran fuerza rítmica como la sensacional Arican Dreams.

@juansarda