El payaso y cómico norteamericano afincado en Barcelona Jango Edwards, que renovó el lenguaje dentro del mundo de los 'clowns' y contagió la risa a varias generaciones, ha fallecido a los 73 años, ha informado el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni. En un mensaje en su cuenta de Twitter, el regidor ha explicado que en la noche del viernes se fue "un maestro de los payasos y un barcelonés de corazón": "Estoy seguro de que continuará iluminando la vida de las almas que le acompañan. Descanse en paz".
Nacido en 1950 en Detroit (EE.UU.) como Stanley Ted Edwards, y tras trabajar en una próspera empresa de paisajismo, Jango Edward se estableció en Europa a principios de los años 70, y residió en Reino Unido, Francia, Holanda y España, entre otros países. Edwards, entre la provocación y la ternura, fue el fundador de la corriente "nouveau clown". Considerado uno de los máximos referentes dentro de su disciplina artística, Edwards creó escuela y es considerado un maestro por grandes cómicos como Leo Bassi, Johnny Melville, Andreu Buenafuente y Guillem Albà.
Eran los años sesenta y empezó a buscar su camino en terrenos variados, como las teorías que defendían el amor libre, la filosofía, la política y la religión, pero finalmente fue el libro El cuarto camino, de Georges Gurdjieff, el que le abrió la mente y le permitió dirigirse hacia el mundo del 'clown', según contó él mismo en varias entrevistas. Su carrera arrancó en Inglaterra, en la London Mime Company, y luego creó su propia compañía, la Dog Breath Theatre Group, que más tarde pasó a llamarse Friends Roadshow, junto a la payasa Nola Rae.
Instalado en Holanda, llegó con su compañía en 1977 al Salón Diana de Barcelona, una ciudad que visitó muchas veces durante el siglo XX -actuó en los Juegos Olímpicos de 1992- y que acabaría convirtiéndose en su casa. En los años 80 y 90 creó espectáculos rompedores que le consagraron, como Garbage y Holey Moley, este último grabado y emitido por la televisión nacional de Francia, país en el que también residió durante largas temporadas.
Siguió creando espectáculos como Klones (1994), Mum (1996) o Tony Balony (1999), y a principios de la primera década del nuevo siglo se instaló en Barcelona, donde en 2004 dirigió un espectáculo de gran formato en el Fórum Universal de la Culturas. Hizo giras por Europa, América y Oceanía, presentando sus espectáculos dentro de iniciativas colectivas, como el circo Roncalli, con el que actuó en 2000, o en solitario, como "WFUN-RADIO 121", en 2001.
Después se instaló como artista residente del teatro Almazen, en el barcelonés barrio del Raval, e hizo frecuentes visitas al Teatro Alfil de Madrid. En su última etapa en Barcelona creó, junto a Johnny Melville, el Nouveau Clown Institute (NCI), en el que imparten clases magistrales Leo Bassi, Pepa Plana, Nola Rae y Moshe Cohen, entre muchos otros. Esta escuela de payasos fue la impulsora del festival "Jango Edwards: the man, the myth, the legend" en el teatro La Gleva en 2020, en el que el artista norteamericano estuvo acompañado sobre el escenario por Tortell Poltrona, Mario Gas o Andreu Buenafuente, entre otros.
Jango Edwards anunció en septiembre del año pasado que padecía un cáncer incurable. "Tengo 72 años y me estoy muriendo, pero por dentro soy un niño de seis años, excepto por mi pene", bromeó en una entrevista con la Agencia Efe, antes de resaltar, ya más en serio, que "he sido libre y no he desperdiciado ni un día de mi vida", y de animar a todos a recuperar el payaso que llevamos dentro y ser libres.
Edwards, que ha fallecido esta pasada noche en su casa de la Barceloneta mientras dormía, estuvo trabajando hasta el último momento y hace un par de semanas terminó su libro The Clown Bible, con la ayuda de muchos amigos, en el que repasa su trayectoria y el movimiento del "nouveau clown". Jango Edwards estaba unido sentimentalmente a la actriz y 'clown' catalana Cristi Garbo, a la que conoció en 1997.