Kris Kristofferson, leyenda de la música country y del Hollywood de los 70, ha muerto este sábado a los 88 años en su casa de Hawái, según ha informado su familia. Cómo compositor deja un legado enorme, con canciones como Me and Bobby McGee, For the Good Times, Sunday Mornin' Comin' Down y Help Me Make It Through the Night.

Como intérprete en la gran pantalla, su figura será inolvidable en filmes como Pat Garrett y Billy el Niño (Sam Peckinpah, 1973), Quiero la cabeza de Alfredo García (Sam Peckinpah, 1974), Alicia ya no vive aquí (Martin Scorsese, 1974) o Ha nacido una estrella (Frank Pierson, 1976), en la que compartía pantalla con Barbra Streisand y por la que recibió el Globo de Oro.

Nacido en 1936 en Brownsville (Texas), Kristofferson parecía desde joven destinado a la mayor gloria. Pronto destacó en el deporte, y ya en la Universidad de Pomoma, en California, donde estudió Literatura, apareció en la revista Sport Illustrated como gran promesa del rugby y del futbol americano. Gracias a una beca, pasaría un tiempo en la Universidad de Oxford, donde triunfó en la práctica del boxeo.

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Por presión familiar (era hijo de un General de la Fuerza aérea de los Estados Unidos) se alistó en el ejército, justo después de contraer matrimonio con Fran Beer. Alcanzó el rango de Capitán y estuvo destinado en Alemania Occidental como miembro de la 8.ª División de infantería. Sin embargo, abandonaría las armas para dedicarse por completa a su gran pasión, la música, lo que le llevaría a romper relaciones con su familia. 

Asentado en Nashville, la cuna del country, Kristofferson empezó a componer canciones mientras desempeñaba trabajos de todo tipo. Fue como responsable de mantenimiento de los estudios Columbia Records que conoció a Johnny Cash y Bob Dylan.

En 1966, Dave Dudley publicó el sencillo Viet Nam Blues, una canción compuesta por Kristofferson que tuvo gran repercusión en Nashville. Un año después, Kristofferson firmó un contrato discográfico con Epic Records y empezó a escribir para artistas como Ray Stevens, Jerry Lee Lewis o Roger Miller. Gracias a estos éxitos, su nombre comenzó a hacerse conocido y su carrera como solista despegó. 

En 1970 debutó con el sello Monument con el álbum Kristofferson, que incluía temas que habían grabado previamente otros artistas. Enseguida, empezó a ser versionado por grandes como Elvis Presley, Ray Price, Waylon Jennings, Bobby Bare, Janis Joplin y el propio Johnny Cash.

El fracaso comercial de su quinto disco, Spooky Lady's Sideshow, publicado en 1974, supuso un bache en su carrera como intérprete musical, aunque siguió teniendo un enorme éxito como compositor. Willie Nelson llegó a publicar un disco completo con canciones de Kristofferson. 

Con este formaría en 1985 el supergrupo The Haywaymen, al que se sumaron también Johnny Cash y Waylon Jennings, que se mantendría en activo durante más de una década, con gran éxito. Kristofferson nunca dejó de componer y de grabar, aunque no recuperó la atención del público de sus primeros años. En 2021 se retiró de los escenarios. 

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Como actor, fue una de las grandes estrellas del Hollywood contracultural de los 70. Su primer trabajo fue a las órdenes de Dennis Hopper, en La última película (1971), filme experimental que mantenía las coordenadas de la seminal Easy Rider (1969). Después, trabajaría con Paul Mazursky en Blume enamorado (1973) e iniciaría con Pat Garret y Billy el Niño (1973) una fructífera colaboración con Sam Peckinpah, que se prolongaría en Quiero la cabeza de Alfredo García (1974) y Convoy (1978). 

Dos de sus mejores trabajos llegarían en la misma década: Alicia ya no vive aquí (Martin Scorsese, 1974) y Ha nacido una estrella (Frank Pierson, 1976), por la que recibió el Globo de Oro. También protagonizaría La puerta del cielo (1980), un enorme fracaso comercial de Michael Cimino que acabó con la productora United Artist y que con los años se ha convertido en un imprescindible filme de culto.

Aunque siguió trabajando profusamente en la gran pantalla, en muchas ocasiones en producciones discretas, todavía dejaría algún buen papel, como el sheriff corrupto de Lone Star (John Sayles, 1989). A partir de su aparición en Blade (1998), Hollywood volvió a contar con él como secundario en grandes producciones como Payback (Brayn Helgeland, 1999) o El planeta de los simios (Tim Burton, 2001).

Kristofferson estuvo casado tres veces, con Fran Beer, Rita Coolidge y Lisa Meyers, y tuvo 8 hijos. También tuvo una relación sentimental con Janis Joplin.