Los premiados (de izda a dcha): Alberto Arroyo, Carlos David Perales, Carlos Fontcuberta y Miguel Trillo-Figueroa.

El Preludio a Borís coronó anoche a Carlos Fontcuberta Llavata (Valencia, 1977) en el acto final del Premio Jóvenes Compositores 2011 que organizan la Fundación Autor y el Centro Nacional de Difusión Musical. En el Auditorio 400 del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Madrid el grupo SMASH Ensemble abordó con sumo rigor las cuatro obras finalistas. Concurrían, además de Fontcuberta, los compositores José Miguel Trillo-Figueroa (segundo premio), Alberto Arroyo (tercero) y Carlos David Perales (mención honorífica). No lo tuvo fácil el jurado, integrado por los compositores Ramón Lazkano, Alicia Díaz de la Fuente y Juan Cruz Guevara, en esta convocatoria, a la que se han presentado 37 obras de ocho países, 23 de ellas españolas.



Este año el primer premio 'Xavier Montsalvatge', dotado con 6.000 euros, ha recaído en un autor "en la sombra", como él mismo reconoce. "Preludio a Borís es el resultado de un esfuerzo concienzudo y constante al margen del circuito, lo que me ha permitido trabajar a mi ritmo y sin presiones de ningún tipo". Con el propósito de contribuir al desarrollo y conocimiento social de nuevos lenguajes, tendencias y modos de expresión musicales, el Premio Jóvenes Compositores fue creado en 1987 para estimular la creación de autores de hasta 35 años. "Lo cierto es que no me he prodigado demasiado en los concursos, pero conocía bien éste y escribí una obra expresamente para la ocasión. Por edad, era el último año que podía presentarme y quise darlo todo". Para Fontcuberta el verdadero premio ha sido llegar a la fase final del concurso. "Tener la oportunidad de que tu obra se dé a conocer de la manera que lo hizo el SMASH Ensemble es el sueño de cualquier músico. No es fácil que tu obra suene tal y como la has imaginado y escrito".



El estreno de Preludio a Borís fue registrado en el Auditorio 400 y se editará próximamente en un disco promocional de la propia Fundación Autor. "Lo primordial es que la obra rompa las barreras del sonido y llegue al mayor número de gente". El punto de partida al que le debe su nombre la partitura fue la música de la coronación del segundo cuadro de la ópera Borís Godunov de Músorgski. "En mis composiciones suelo hacer referencias a la música del pasado, no de manera evidente o mimética. En vez de recurrir a la cita, empleo sutiles referencias a su entramado armónico, de manera que su resonancia histórica y cultural surja de manera natural. De esta manera, mi obra ha empleado los acordes y el sonido de las campanas de la escena de Borís Godunov". Precisamente el Palau de les Arts de Valencia inauguró su temporada hace unos días con una versión primigenia de la ópera de Músorgski. "Tuve ocasión de ir a verla y confirmar mi admiración por la avanzada sonoridad y la fuerza expresiva del compositor ruso". De momento, el gran género lírico sólo le ha servido de inspiración coyuntural, no de reto. "Para decidirte a componer una ópera hace falta mucho madurez... y un encargo".



Fontcuberta pertenece a la rara especie de compositores que no se han visto abocados al exilio. "Soy la otra versión de la historia, represento a los músicos que se quedan". Fue en el Conservatorio Profesional de Música de Valencia donde se formó como músico y ahora imparte clases de Contrapunto en el Conservatorio Superior de Música de Castellón. "Lo importante, más que viajar, es no perder el contacto con figuras y grupos de primer nivel. Hay que conocer mundo, pero también se pueden hacer cosas desde España. A mis alumnos les digo siempre que hay que tender puentes hacia fuera. El cómo lo deciden ellos". Sin renunciar a su pasaporte ni a su residencia, Fontcuberta ha participado en varios talleres internacionales y esta temporada su obra Perdiéndose en el rumor de la memoria, encargo del Grup Instrumental de València, está recorriendo España a lomos del Plural Ensemble de Fabián Panisello. Parece que el compositor empieza a estar en el punto de mira. "Creo que estoy en condiciones de responder mejor a la presión que hace algún tiempo. Este estar en la sombra me ha beneficiado y me ha permitido madurar con tranquilidad. Creo que el Premio ha llega en el momento más oportuno".