Lucas Vidal, con solo 39 años, es uno de los grandes compositores y directores de orquesta de la época. Ha trabajado en numerosos proyectos de la gran pantalla o en eventos deportivos como en los Juegos Olímpicos de Rio 2016. Ello le ha llevado a ganar un premio Emmy y dos premios Goya. Este viernes presenta en los Veranos Villa de Madrid su proyecto más personal: Karma.

"Karma surge con la intención de juntar el mundo de la música electrónica y la música orquestal. Al ser un proyecto personal, partía desde cero, desde una parte más abstracta. Salía de mi zona de confort", afirma Vidal en una entrevista con El Cultural. Karma es un espectáculo que rompe con la figura del concierto tradicional. Vidal publicó Karma (Universal) en 2020 y fue un gran éxito entre la crítica y el público.

"Karma surge con la intención de juntar el mundo de la música electrónica y la música orquestal"

Vidal ha compuesto obras para proyectos muy relevantes en el mundo del cine como Palmeras en la nieve (2015) o Nadie quiere la noche (2015) con las que obtuvo dos premios Goya el mismo año a mejor canción original y mejor música original respectivamente.

También ha trabajado en la música de series como Érase una vez…pero ya no (2022), Élite (2018) o Dime quién soy (2020) y ganó un Emmy al mejor tema musical con la composición de los Juegos Olímpicos de Rio 2016 para ESPN. En contraposición, Karma es algo diferente: "Este proyecto es muy personal, ya que no sigue un guion específico, como en el cine o en las series, o en los eventos deportivos como la LaLiga o las Olimpiadas".

El objetivo es que este proyecto sea una experiencia inmersiva, aparte de la música también habrá imágenes. Vidal, sin embargo, destaca el lugar donde se celebra el evento: "En el concierto, aparte de la música, habrá elementos visuales. Lo que más destaco es el lugar donde se realiza, en el Claustro del Pozo. Es un sitio es precioso, muy emotivo. Es un elemento clave que ayudará a crear el ambiente inmersivo entre el público". El claustro es el más antiguo de Madrid, de 1672, y se ubica en el Instituto de Educación Secundaria San Isidro.

En Karma se juntan dos tipos de música que, en un principio parecen opuestos. Para Vidal, funciona al contrario: "La música orquestal y la música electrónica son dos mundos paralelos". El objetivo con este concierto es hacer el que público se introduzca en sus propios pensamientos: "Karma es un proyecto electrónico con elementos orquestales, violín, viola, violonchelo… Donde las canciones son instrumentales, no hay letras y se mezclan estilos diferentes. Se trata de dejar al público la capacidad de imaginar cualquier escenario a partir de la música".

En abril de este año, Vidal presentó su primera zarzuela contemporánea: Trato de Favor. Para este artista, Karma ha terminado siendo una obra complicada y un reto para sí mismo: "Al final, al ser un proyecto más íntimo y que la mezcla de sonidos tiene su complejidad, he tardado más tiempo en dar con el sonido perfecto".