La cantautora, modelo y actriz Françoise Hardy, icono de la música francesa en la década de los 60, ha muerto este martes a los 80 años, según ha informado en redes sociales su propio hijo, Thomas Dutronc, en un mensaje que ha publicado en Instagram. Un lacónico "Mamá se ha ido", acompañado de una fotografía de Hardy sonriendo y sosteniéndole cuando era un bebé.
Françoise Hardy fue una de las primeras cantantes pop francesas en hacerse conocida fuera de las fronteras galas y una de las máximas representantes de la ola 'yé-yé'.
Reina de las canciones melancólicas que hablan de dudas, relaciones tormentosas y recuerdos nostálgicos, entre sus canciones más conocidas están Comment te dire adieu ("Cómo decirte adiós"), Mon amie la rose ("Mi amiga la rosa"), L'amitié ("La amistad") y Message personnel ("Mensaje personal"). A lo largo de su dilatada carrera publicó más de 30 discos.
Hardy, enferma de cáncer linfático y de laringe desde hacía veinte años, fue una de las voces más conocidas a favor de la regularización de la eutanasia en Francia, motivo por el cual llegó a dirigir al presidente galo, Emmanuel Macron, una tribuna de prensa para reclamar una muerte digna y legal. Los efectos secundarios de la radioterapia y la inmunoterapia provocaron que sus días "fueran un infierno", según declaró en una entrevista.
En 1962, Hardy grabó Tous les garçons et les filles, el single con el que alcanzó una gran popularidad y que se ha considerado como un verdadero himno generacional del que se han vendido millones de copias. Ese mismo año también publicó otros de sus sencillos más conocidos, como J'suis daccord o Le temps de l'amour.
Un año después participó en el Festival de Eurovisión representando a Mónaco con la canción L'amour s'en va, logrando la quinta posición. Desde ese mismo año empezó a tener éxito en Italia y Portugal, y visitó España por primera vez en octubre de 1963 para actuar en Barcelona.
Desde 1964, coincidiendo con la llamada "invasión británica" del pop, Hardy decidió empezar a grabar su música en estudios ingleses y grabó versiones de sus canciones en ese idioma. También dio el salto a Estados Unidos, donde su álbum de debut fue editado allí con el título The "Yeh-Yeh Girl From Paris!. También se hizo famosa en Alemania tras su aparición en un programa de televisión musical en aquel país.
Como modelo también fue musa de diseñadores como André Courrèges, Yves Saint Laurent o Paco Rabanne. La cantante francesa también saltó a la gran pantalla con películas como Un castillo de Suecia, dirigida por Roger Vadim; ¿Qué tal, Pussycat?, de Clive Donner, o Grand Prix, de John Frankenheimer, entre sus títulos más destacados.
Hardy también se dedicó a la escritura. Desde 1970 escribió a menudo sobre astrología, y también fue autoras de libros de ficción y no ficción. Sus memorias Le désespoir des singes... et autres bagatelles ("La desesperación de los simios... y otras bagatelas", traducidas al español por Felipe Cabrerizo en la editorial Expediciones Polares) fue un éxito de ventas en Francia.
Con una personalidad tímida, Hardy nunca se sintió a gusto con la atención de la fama. Nació en París durante un ataque aéreo en la Segunda Guerra Mundial, hecho al que atribuía su carácter ansioso. No obstante, fue una excelente estudiante y obtuvo su título de bachillerato dos años antes de lo que le correspondía, a los 16 años. A cambio, como regalo, le pidió a su padre una guitarra, con la que empezó a componer sus primeras canciones.
Tras matricularse en el Instituto de Estudios Políticos de París, rápidamente lo dejó para estudiar alemán en la Universidad de la Sorbona. Tras varias audiciones fallidas ante representantes de casas discográficas, y alentada por ellos, decidió tomar clases de canto para pulir sus dotes vocales. Se unió en 1961 a Le Petit Conservatoire, una novedosa escuela enfocada en la chanson francesa y con un programa de televisión propio, donde despegó su carrera musical, a la vez que grababa su primer disco con el sello Vogue.
Hardy estuvo en activo hasta hace pocos años. En 2018 lanzó su último disco, Personne d'autre ("Nadie más"), con un videoclip dirigido por el cineasta Fraçois Ozon para la canción Le large. En 2021 anunció que, debido al cáncer de laringe que sufría y a los efectos secundarios de su tratamiento, ya no podría cantar más.