Franz Schubert: "Misa nº 5 y otras obras sacras".
Aunque Schubert es primordialmente conocido por su parcela liederística e instrumental, comenzó su carrera como músico de iglesia, desde que ingresó como corista en la capilla imperial. A lo largo de su vida escribió numerosas obras sacras, destacando sus seis misas y piezas como el oratorio "Lazarus". La "Misa nº 5" es la más ambiciosa de la serie, y también la de más dilatada gestación (la inició en 1819, pero no la terminó hasta 1826). Schubert la compuso para una posible interpretación en la corte, y de ahí su característica de "solemne", aunque las numerosas libertades, tanto de forma como de interpretación del texto litúrgico (Schubert siempre tuvo una visión muy personal del tema religioso) no fueron bien acogidos.
La versión que nos ofrece Peter Schreier al frente de su propio coro (formado por integrantes del magnífico coro finlandés Tapiola ) es magnífica, equilibrada y con sentido dramática, realzada por magníficos cantantes (como la soprano Soile Isokoski o el propio Schreier, que como tenor solista en el "Salve Regina" exhibe una impecable musicalidad, que se mantiene intacta por encima del paso del tiempo).
La versión que nos ofrece Peter Schreier al frente de su propio coro (formado por integrantes del magnífico coro finlandés Tapiola ) es magnífica, equilibrada y con sentido dramática, realzada por magníficos cantantes (como la soprano Soile Isokoski o el propio Schreier, que como tenor solista en el "Salve Regina" exhibe una impecable musicalidad, que se mantiene intacta por encima del paso del tiempo).
