Beethoven, Franck: Sonatas para violín y piano.
El robusto sinfonismo del primer movimiento de la Kreutzer beethoveniana está muy bien entendido, al igual que la fluida recreación de las variaciones del segundo y la electrizante intensidad del tercero, donde Perlman se supera a sí mismo. La obra de Franck, mezcla exquisita de delicadeza y poderoso romanticismo entre francés y alemán, está adecuadamente matizada.
Versiones animadas además por la fuerza del concierto en vivo, dotadas de calor y de esa vibración singular que se produce de la unión de dos artistas de excepción. Poco que envidiar a las grandes interpretaciones de Grumiaux/Haskil, Szigeti/Bartók, Ferras/ Barbizet (Beethoven), Oistrakh/ Richter u Oborine, Francescatti/Casadesus (Franck). Perlman mejora en todo caso sus prestaciones anteriores con Ashkenazy para Decca.