Estamos ante una de las mejores producciones del Teatro Real, en la que pueden encontrarse "peros" menores como la innecesaria subida del escenario al final del primer acto, pero el acierto es pleno. Televisión Española, el canal Arte y ahora este dvd han reflejado fielmente el brillante espectáculo, muy en línea videoclip en la avalancha de cosas que ocurren en los segundos planos. La estética de los muy atractivos decorados discurre en blanco y negro con vestuarios originales atemporales, apoyada por una cuidada iluminación, hasta desembocar en una sinfonía de colores en un final muy de Sagi.

El maestro Gianluigi Gelmetti acierta a la batuta como acierta al desempolvar algunas arias, que dan pié a un lucimiento extra de María Bayo y, sobre todo, a la traca final canora de un Juan Diego Flórez que, en estado de gracia, borda el papel. No hay ningún tenor que pueda cantar Rossini, con tal facilidad y detallismo, con esa frescura de voz, con tal línea y musicalidad... No es extraño que Don Basilio, el profesor de música, mirase con admiración todas las endiabladas e interminables coloraturas de la cabaletta final. éste es Ruggero Raimondi, lleno de solvencia escénica en su momento central. La soprano María Bayo muestra en Rosina ese timbre tan personal como exquisito y su depurada escuela. Pietro Spagnoli se contagia del clima para brindar un Fígaro más juvenil de lo habitual, mientras que Bruno Praticó aporta sus dotes cómicas.

Un segundo DVD completa de forma estupenda esta publicación, con explicaciones de la obra a cargo de los artistas, un amplísimo dossier fotográfico y, lo que es muy interesante, un reportaje del montaje de puertas adentro. Todo ello logra que el espectador disfrute de principio a fin con una ópera cómica tan genial como la de Rossini. gonzalo alonso