Nueva versión, y casi de referencia, de la que quizá sea la ópera más conocida de Wolf-Ferrari junto con Sly, y desde luego de mucha más gracia que ésta, recordando por su plantilla vocal, comicidad y brevedad a La serva padrona de Pergolesi. El tema está de moda: el tabaco. En la casa huele a cigarros y el marido sospecha que su mujer tiene un amante fumador. Pero no, ella es quien fuma. Final feliz, los dos fumando. Un encanto de ópera, cantada con intención y matices por Judith Howarth y ángel ódena, que supone el debut lírico-discográfico de la Orquesta Ciudad de Oviedo con su titular Friedrich Haider, quien realiza una excelente labor con la agrupación, de la que queda constancia en esta grabación paralela al concierto celebrado en la capital asturiana en mayo de 2006.