La boda
Juan el Lebrijano
24 febrero, 2012 01:00La historia de estos registros es la de la casualidad cuando alguien, quizá con el habilidoso olfato de la premonición, colocó una grabadora en el lugar preciso y en el momento oportuno. Ocurrió en 1964 durante la gran fiesta que se originó con motivo de la boda de un cantaor que saboreaba los primeros favores del éxito, nacido en el seno de una ilustre familia gitana de músicos flamencos. Juan el Lebrijano se casaba con la bailaora gaditana Charo Cortés y la celebración fue memorable. Allí estaban, entre otros muchos, La Niña de los Peines, ya retirada; su marido, Pepe Pinto; Antonio Mairena, el cantaor más influyente del momento, además de numerosos integrantes de las distintas casas de la zona. Nadie había visto a La Niña de los Peines cantar y bailar con total frescura a pesar de sus 74 años, mostrarse desinhibida en una dialéctica de participación sin tregua, a lo largo de una deslumbrante noche en la que no existió el desmayo. Cuando El Lebrijano tuvo a punto el material sonoro, que había dormido el sueño de los justos cerca de medio siglo, le mostró el hallazgo a su amigo Enrique Morente que, en el libreto que acompaña al disco, califica La boda de "joya documental".