Jango Edwards monta el pollo
El genial "clown" despide Las Noches del Español
25 mayo, 2006 02:00Jango Edwards actúa con Peter Echo en Madrid
Las Noches del Español tocan a su fin esta semana. El 26 de mayo Jean-Louis Trintignant ofrece una lectura de poemas de Apollinaire y el día 28 uno de los más grandes "clowns", Jango Edwards, despide esta programación especial con Classics Dúo, una selección de sus delirantes sketches que no hay que perderse. Casi paralelamente, el Alfil, templo cómico madrileño por excelencia, organiza su Festival Internacional del Humor.
19 horas de espectáculo
Edwards no sabe estarse quieto, es como un niño travieso; durante la conversación que mantenemos no para de enredar con simples objetos que, sin saber cómo, llegan a sus manos y para los que encuentra usos impensables. ¿Dónde acaba el payaso y donde empieza el hombre? Cuenta que en el espectáculo que va a presentar en el Español, Classics Duo, "empiezo vestido y acabo desnudo". Es una recopilación de número clásicos de su repertorio que, según dice, "si los representara todos seguidos haría un espectáculo de 19 horas de duración. Llevo 40 años como clown y tengo numerosos sketches y personajes. Ahora Peter Echo y yo hacemos cada noche los que se nos ocurren, de forma que cada espectáculo es irrepetible". Echo es la pareja de Edwards desde hace siete años, un reconocido payaso italo-americano que aporta al espectáculos tipo como el profesor Robert Shitface (Cara de mierda), Juanita Banana o el imitador japonés de Elvis Presley, FuCanSing (Fu puede cantar). Por su parte, Edwards saca a Superman, el pastor del Rock and Roll o The Great Retardo (El gran retardo), entre otros. El payaso insiste bastante en lo irrepetible que resultan sus actuaciones porque"en realidad no sé lo que voy a hacer cada noche"; esto es posible gracias a su capacidad para improvisar y su extraordinario domino de las variadas técnicas "clown" (mimo cómico, acrobacias, magia, danza...) que le permiten entrar en comunicación con los espectadores fácilmente. A pesar de su descaro, a Edwards no le gusta intimidar al público. Tampoco pertenece a esa saga de provocadores profesionales que se dedican a ridiculizar a los que ideológicamente le caen mal. él busca sobre todo la risa del espectador con sus locos personajes, sus travestismos, sus historias surrealistas que pueden ser maltinterpretadas: "He tenido problemas con los Estados Unidos, creen que soy antiamericano. Hace un año, en Santiago de Compostela, aparecí como peregrino desnudo diciendo que había que hacer ‘la guerra a la guerra’ y mis palabras se sacaron de contexto con todo lo que estaba cayendo (Afganistán, Guerra de Irak ...). Pero en realidad, escríbalo, amo a América. Lo que pasa es que los clowns nos sentimos anarquistas, nos gustaría eliminar las leyes, lo cual no quiere decir que nos guste el caos. Creemos que nadie tiene la razón absoluta y eso es lo que nos gusta hacer ver a la gente; en este sentido somos muy parecidos a los periodistas. En realidad, los ‘clowns’, que son unos extraordinarios actores, son un reflejo de la sociedad, del mundo, y si éste está en crisis, nosotros también".
La milicia de los tontos
La biografía de Jango es, desde luego, la de un inconformista. Nacido en Michigan (Estados Unidos) hace 57 años, ganó bastante dinero a base de vender terrenos y construir campos de golf. Una visita a Europa y un manual de autoayuda cambiaron su destino. Se fue a Londres, se hizo artista ambulante y fundó varios grupos independientes; poco después se trasladó a Amsterdam, donde creó el Festival de los Locos, cita obligada para los payasos de todo el mundo. Ahora, afincado en Barcelona, anda metido en el proyecto de crear "La milicia de los tontos", "una parodia en la que los payasos actúan como militares, pues van por el mundo ‘montando pollos’", explica. Los "clowns" son, por lo general, artistas muy interconectados, ni las distancias ni los idiomas son un obstáculo para ellos. La razón es que se necesitan, las técnicas se transmiten de unos a otros y Edwards se ha dedicado en los últimos años a dar clases: "Me dirijo mucho a los jóvenes, pero es complicado porque en realidad no hay un sólo método".
...Y también el Festival Alfil
El Alfil es hoy el templo del humor de Madrid. La línea que ha impuesto el grupo Yllana a la programación de esta pequeña sala lo ha convertido en referencia para "clowns", mimos y compañías cómicas a su paso por la capital. Además, todos los años celebran el Festival Internacional de Humor que en esta edición, y por primera vez, se van a beneficiar ocho pueblos de la Comunidad de Madrid. Es un certamen pequeño, pero que permite invitar a artistas extranjeros. El día 29 lo inauguran los Jashagawronsky Brothers, especie de Luthiers a la armenia; ofrecen un concierto a base de sierras, sartenes, cucharillas, tenedores e inventan sus propios instrumentos, un espectáculo a medias entre el clown y la música. La compañía española Pez en Raya es una fija del Alfil, llega el día 30 con su último montaje, Hot Burrito, ‘one show man" de Joan Estrader, dirigido por Cristina Medina (protagonista de Sólala). La gracia de Clak, que presenta Capa y Espasa, reside en que está concebido como una parodia de las más famosas escenas del cine. Echando mano de la onomatopeya, el humor gestual y el evocador poder de la música, los actores buscan la risa del público con las películas antiguas (día 31). El cantante y humorista Riki López ofrece un hilarante concierto que saltea con monólogos abiertos a la improvisación en Dando el Kante (1 de junio). Y de Inglaterra llega un prolífico artista australiano, Brendon Burns, que estrena Sober, not clean, stand-up en inglés (2 de junio). Muy asiduos en la programación del Alfil son también la compañía Sexpeare, surrealista y concentrado humor que en For Sale ofrece una comedia a ritmo trepidante, marca de su personalísimo estilo (3 de junio). Para terminar, Sax o Fon también recurre a la música y a las técnicas clown en Crea y recrea. Su intención es ofrecer un espectáculo didáctico en el que cuatro músicos-actores descubren diferentes formas de hacer música a partir de utensilios domésticos (4 de junio).