Escena de Incrementum

Incrementum, Tik, Tik... boom, Locas por Pepe el Napolitano y Con la muerte en los tacones son los estrenos que llegan esta semana a las salas pequeñas de algunos teatros madrileños.

El humor y el pequeño formato son los grandes aliados de los teatros en verano. Al margen de los festivales, la mayoría de los estrenos son obras de estas características, como atestiguan cuatro montajes de la cartelera madrileña.



Incrementum es una obra que George Pérec escribió en 1986, aunque da la impresión por su temática que la finalizó ayer. Trata de la difícil aventura de ir al despacho del jefe para pedir un aumento de sueldo y culminarla con éxito. Ese es el objetivo del protagonista, pero Pérec no se detiene sólo en él: pone a prueba también al jefe y a todos los compañeros de oficina mostrando cómo es cada uno debajo de la máscara, el auténtico trasunto de este divertido texto. Con él vuelve al teatro como director el actor Sergio Peris-Mencheta, después de varios años alejado de los escenarios. La obra de Pérec estará en la sala II de Las Naves del Español, en el Matadero, hasta el 31 de julio.



Hace unos quince años Jonhatan Larson consiguió un gran éxito en Broadway con Rent. Crítica y público consideraron que la nueva La Bohéme, donde el sida sustituía a la tuberculosis, era una gran obra que merecía los máximos premios, como luego consiguió. Su autor no llegó a disfrutarlos, ya que falleció la víspera del estreno. También, antes de ese éxito lo había intentado sin conseguirlo con un musical autobiográfico de pequeño formato llamado Un monólogo rock, que él mismo interpretó. Años después el escritor David Auburn fijó su mirada en la obra. Al original añadió algunos números y personajes, la transformó escénicamente y le cambió el título. Ahora, reconvertida en ¡Tik, tik … boom! la compañía Tela Katola la estrena en España con una adaptación de Pablo Muñoz-Chápuli que estará en la sala off del Lara, o sea el vestíbulo, hasta el 24 de julio.



En los últimos años están apareciendo libérrimas versiones teatrales de títulos que se inspiran en personajes a veces minoritarios o muy simbólicos. El último en subirse a este vagón ha sido Juan de la Cruz con Locas por Pepe el Napolitano. Desde el título la obra ya remite a La casa de Bernarda Alba, de Lorca, aunque cambia el alias del novio de una de las hijas que en el original es Pepe el Romano. Igual hace con el resto de personajes, pues las principales protagonistas son dos nuevas hermanas que viven con el fantasma de su madre que las atormenta. La compañía canaria Profetas de Mueble Bar, con un elenco mayoritariamente masculino para una obra que Lorca concibió únicamente para actrices, la representa hasta el 28 de agosto en el Pequeño Teatro Gran Vía.



En cambio, el protagonismo es totalmente femenino en Con la muerte en los tacones, en la sala pequeña del Nuevo Teatro Alcalá. La obra dirigida por Joan Miquel Reig disecciona a tres hermanas que viajan de Parla al Mar Menor para aventar las cenizas de su madre tal y como era su deseo. El camino se les hará largo y duro, padecerán persecuciones, vivirán unas cuantas aventuras, y acabarán su periplo transformadas en algo muy diferente a como lo empezaron.