Una escena de La duda, de Darío Facal

El Teatro Galileo abre su temporada con dos entregas de marcado acento social. La primera de ellas, La duda (que puede verse hasta el próximo domingo), llega de la mano de Darío Facal, que ha convertido el texto de John Patrick Shanley (Nueva York, 1950) -llevado al cine por él mismo en 2008 con Meryl Streep y Philip Seymour Hoffman encabezando el reparto- en una profunda reflexión, con los abusos infantiles como telón de fondo, sobre la moral y las resbaladizas certezas de la sociedad. Carmen Conesa, Ernesto Arias, Marta Wall e Ileana Wilson protagonizan un montaje producido por Metatarso, que ha puesto su habitual sello en la puesta en escena a través de una plástica muy personal, en el que espacio sonoro y diseño de luces están al servicio de la carga dramática del relato.



También en el Galileo, a partir del 14, Antonio C. Guijosa lleva a la sala madrileña Contra la democracia, una obra de Esteve Soler (Barcelona, 1976) compuesta por siete pequeñas piezas "rellenas de ácido sulfúrico" en la que se muestra con sentido crítico, entre el horror, la ironía y la comedia, el papel del individuo en la sociedad. "En virtud de nuestra creencia en la democracia -señala Guijosa- se ha producido un proceso perverso por el cual cualquier barbaridad acompañada de la etiqueta de ‘democracia' se ha convertido en tolerable. La obra nos pone frente a un espejo que tal vez arroje una imagen incómoda. Soler nos propone siete puntos de reflexión sobre nuestro funcionamiento social y nos empuja a generar nuestro propio criterio. Por mi parte, intento promover el debate y ver qué podemos hacer para cambiarlo a mejor".



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