Los caminos de las musas son inescrutables. Un acorde de guitarra tiene la culpa de que exista Gólosa, el debut como autor y director de escena del actor malagueño Ángel Velasco, que podrá verse este fin de semana —sábado 6 y domingo 7 de julio— en la sala Cuarta Pared de Madrid después de haber triunfado en la cartelera de Málaga. “Estaba hablando con mi compañera de piso. Toqué ese acorde —un mi menor añadiéndole un fa sostenido en la cuerda más grave, para más señas— y su sonoridad me llevó al desierto. Empecé a inventar una historia loca que sonaba a chiste, y ella me dijo que ahí había una obra de teatro. Un mes después me senté a escribirla en serio”.
Velasco nos pone en situación: “Alguien conduce un coche a toda velocidad en mitad de la nada más absoluta, en situación de urgencia, con un cadáver en la parte de atrás del coche. A lo largo de una noche muy larga se encuentra con personajes disparatados, cada uno con menos sentido que el anterior, mientras que, para mayor absurdo, en la radio del coche no se sintoniza nada que no sea una especie de cantautora en ruso, un idioma que el protagonista no entiende”.
Detrás de esta intrigante sinopsis se esconde un cóctel variado de ingredientes, influencias y técnicas. Combina teatro del absurdo y teatro físico con personajes arquetípicos y se parece a una “road movie” a la americana, aunque con ecos del Este de Europa y su sangrienta actualidad.
La obra pretende reflexionar seriamente sobre la violencia que nos rodea en todas sus formas, pero con el reto de hacerlo en clave de comedia negra, sin frivolizar pero a la vez haciendo reír. Y, además, con música en directo. Todo un desafío para un dramaturgo debutante.
“Vivimos en un mundo repleto de violencia, pero el mismo telediario que te muestra toda esa violencia te dice: ¡No pasa nada, a vivir!. Es algo muy complejo”, reflexiona el autor de la obra. Del mismo modo, el protagonista vive sus locas peripecias mientras escucha en la radio a la cantautora rusa cantar contra la guerra.
El actor Steven Lance protagoniza la obra; un versátil Víctor Castilla interpreta hasta cinco personajes con los que se va encontrando el protagonista —poliédrica labor por la que ganó el Premio Ateneo de Teatro al mejor actor del Ateneo de Málaga—; y Lucía G. Lara hace el papel de narradora y a la vez es el cadáver que viaja en la parte de atrás del coche, lo que la obliga a un encomiable trabajo de disociación entre su cabeza y el resto de su cuerpo.
Por su parte, la cantautora rusa que se oye en la radio del coche, y que en realidad está en un rincón del escenario, es la actriz y cantante María Luisa Tomás, alias Tirititando de Luisa. Ella ha compuesto la música y sobre ella interpreta versos de poetas rusos que se ha aprendido fonéticamente porque en realidad, como el protagonista de la función —y suponemos que como la mayoría del público, por lo que la traducción al castellano aparece en sobretítulos— no conoce el idioma. De hecho, "gólosa", el título de la obra, es la transcripción fonética de la palabra "voces" en ruso.
De la guerra a la autoviolencia
“Jugando con el imaginario del público y la americanada del “thriller” y la “road movie”, Gólosa intenta meter en la misma caja negra del teatro toda la violencia del mundo”, explica Velasco. Para ello, la subdividió en tres tipos: la de mucha gente contra mucha gente, es decir, la guerra; la de una persona contra otra, que en la obra queda reflejada con un caso de violencia de género; y la que se ejerce contra uno mismo, lo cual tiene que ver con la salud mental, otro de los temas que trata Gólosa.
Todo ello concentrado en “una historia muy entretenida”, afirma el autor de la obra, de poco más de una hora de duración. “Hemos trabajado con la premisa de que la función le guste a todo tipo de públicos. No me preocupa que todo el mundo lo entienda todo. Me conformo con que una parte del público se vaya entretenida y otra parte salga dándole vueltas a la cabeza”, reconoce Velasco. En cuanto a la elección de la comedia para tratar un tema tan serio como la violencia, afirma: “Es mucho más difícil hacer comedia que cualquier otra cosa, pero bien hecha, la comedia capta la atención de la gente y eso permite que llegue mejor el mensaje”.
El proyecto se hizo realidad gracias a Factoría Echegaray, la incubadora de proyectos escénicos del Teatro Cervantes de Málaga para incentivar el tejido teatral local. Después de convertirse en la obra más taquillera de la factoría, ahora recala en la Cuarta Pared, puntal del off madrileño con un Premio Nacional de Teatro en su haber, y en octubre podrá verse en la localidad malagueña de Ronda, a la espera de ir sumando nuevas fechas y ciudades.
Otro artista multiempleado
Ángel Velasco ha participado como actor en series como Muertos SL (Movistar Plus+), 4 Estrellas (TVE), Toy Boy (Netflix) y Todo por el juego (Movistar Plus+). En el teatro ha actuado en obras como En la pista, en el Teatro del Soho CaixaBank de Málaga; en La herencia de los Miller, en Teatros Luchana; en Los últimos, en Teatro de la Abadía; y en Souvenir, en el Teatro Cervantes.
Como director grabó el videoclip de 1+1 son 7, la nueva versión de la famosa sintonía de cabecera de la serie Los Serrano que Fran Perea grabó junto a Despistaos y a sus antiguos compañeros de reparto.
Más allá de su currículum, la historia de Ángel Velasco, formado en Málaga y afincado desde hace media vida en Madrid, es la de tantos profesionales de las artes escénicas y audiovisuales multiempleados. "Me refiero a multiempleo real: no significa que trabaje para mucha gente distinta [eso es pluriempleo], sino que trabajo de mil trillones de oficios a la vez", precisa el actor, autor y director de escena.
A lo largo de su carrera, Velasco ha hecho y hace de todo, desde dar clases de teatro en colegios mayores a ejercer actualmente como técnico backliner en la gira de la cantante Vicco. Siempre con varios frentes abiertos a la vez y con un nivel considerablemente alto de estrés. "Pero tampoco me las doy de mártir. Lo sabíamos cuando nos montamos en este barco, no pasa nada. No me pesa siempre y cuando pueda seguir viviendo de lo que vivo, estoy bien, soy feliz". Y a por lo siguiente.