Letras

Crisis abierta entre editores

La Federación de Gremios de Editores de España, dividida por las tensiones entre los editores de Madrid y Cataluña, con la Feria de Francfort como excusa

25 enero, 2007 01:00

El nombramiento de Jordi Úbeda como presidente de la Federación del Gremio de Editores de España (FGEE) ha coincidido con el enfrentamiento de los dos gremios más importantes de España, el de Madrid y el de Cataluña, que facturan el 90 por ciento del sector. La excusa es el stand que lla Feria de Francfort destina todos los años a la FGEE y que este año reclama el Gremio de Cataluña. Pero es, cuentan, la punta de un conflicto que lleva años larvándose en silencio, por la deriva nacionalista cada vez más acentuada de los editores catalanes que está "colmando la paciencia" de sus colegas madrileños.

Una regla no escrita había establecido la alternancia, cada dos años, de la presidencia de la Federación de Gremios de Editores de España entre Madrid y Cataluña. El consenso ha reinado durante años. Ningún problema. Pero este año, con la Feria de Francfort en un horizonte cada vez más cercano y con Cataluña como protagonista, el relevo ha venido acompañado de tensiones. Más aún: "los catalanes han forzado las reglas del juego" confirma a El Cultural el prudente Emiliano Martínez (Santillana), anterior presidente de la FGEE. El conflicto surge cuando, sin previo aviso, en la última reunión el Gremio de Cataluña plantea que la FGEE intercambie el stand que la Feria de Francfort le asigna desde hace años con el de la Generalitat. Una anécdota que puede incendiar la Federación, aunque la semana que viene está prevista una reunión para acercar posturas. Los protagonistas se explican a continuación.

Antonio Roche
"Pretensiones inaceptables"

Antonio Roche, editor de Biblioteca Nueva, reconoce que "aunque siempre nos hemos regido por el consenso, las tensiones entre los gremios madrileño y catalán son una realidad desde hace ya demasiado tiempo. El detonante actual es, efectivamente, que el Gremio de Cataluña ha pretendido, unilateralmente y con el plano de la Feria en la mano, desplazarnos de nuestro espacio tradicional. Y han saltado chispas, porque creemos que la literatura en castellano tiene que estar presente y sentimos cierto resquemor de que esto no sea así. Para salir de este enfrentamiento tendremos que recurrir a editores de prestigio como Josep Lluis Monreal, por ejemplo, ya jubilados, pero respetados por todos, que pongan cordura. Porque nos jugamos bastante más que un stand. No va a ser fácil, pero es imprescindible."

Antoni Comas
"¿Crisis, qué crisis?"

Antoni Comas, presidente del Gremio de Cataluña, niega la mayor: "No hay crisis alguna, al menos yo no soy consciente de ella, y no sé quién puede decir lo contrario. Las opiniones personales me parecen muy respetables, pero el presidente del Gremio de Madrid no nos ha dicho nada de todo esto, y creo que él sigue siendo el máximo responsable. ¿Lo del intercambio de los stands en lFranfort? No es exactamente así, sencillamente se trata de un desplazamiento para que los módulos de los editores catalanes estén unidos y se dé una información más coherente. Por eso no entendería que ningún editor madrileño se molestase. Me parece que quienes intentan azuzar la polémica ni siquiera asistieron a la reunión de diciembre y hablan de oídas. Todavía estamos debatiendo el asunto, además."

Federico Ibáñez
"La estructura de los gremios territoriales es hoy insuficiente"

Federico Ibáñez , responsable de Castalia, es tajante: "los editores de Madrid estamos deseando que la Feria de Francfort sea un éxito, pero creemos que no es necesario que el Gremio de Cataluña prescinda de todos los demás. Su reacción nos ha provocado una enorme preocupación, porque hasta ahora la FGEE había funcionado siempre por consenso. Sin embargo, al negarnos a transigir con sus demandas, nos encontramos con que quieren que lo votemos, y que nuestro voto valga lo mismo que el del resto de gremios, que en conjunto sólo representan un 10 por ciento de la edición, mientras los otros dos suponemos el 90 por ciento del negocio. Lo peor es que uno de ellos filtró el problema al ‘Avui’ y desde ahí se han escrito cosas que nos han molestado profundamente, al acusarnos de no tener territorio ni lengua propia, de no tener categoría profesional... ¿Qué hemos hecho? Pedir un periodo de reflexión a nuestros colegas de Barcelona hasta alcanzar un consenso. La estructura de los gremios sobre una base territorial es ahora insuficiente para representar a la totalidad de la edición. Los editores de libros científicos, técnicos y académicos, los editores independientes, precisan de una integración más adecuada en el sistema de representación de la edición formado, hasta ahora, casi exclusivamente, por los gremios territoriales. Por otro lado, ha habido una diferente evolución de los gremios fundadores: el de Madrid por el crecimiento del número de editores independientes y el de Cataluña por la impronta de las políticas identitarias y la fuerte concentración que ha experimentado la edición en Barcelona. Por último, el debilitamiento de la noción de que el consenso entre los editores de Madrid y los de Cataluña es esencial para el sector y que deben descartarse frentes autonómicos o que rompan ese consenso. Este principio, mantenido durante muchos años, está puesto en cuestión por los planteamientos radicales de la nueva dirección en Cataluña".

José Maria Arizcun
"Inadecuado en el fondo y en la forma"

José María Arizcun, editor de Miraguano y nuevo vocal de la Junta Directiva de la FGEE en representación del Gremio de Madrid, asegura que los incidentes vienen de lejos: "Llevamos tiempo con tensiones. Y en la última, por el stand en Francfort, la actuación del gremio de Cataluña no ha sido especialmente adecuada ni en el fondo ni en la forma. Lo que nos ha molestado es que se presentaron en la última reunión con una propuesta, la del stand, que no estaba siquiera en el orden del día, y que habían discutido con el resto de los gremios, menos con el de Madrid. Espero que la situación se reconduzca, pero llueve sobre mojado. Por ejemplo, desde Cataluña no han respetado algunos acuerdos establecidos por CEDRO ni con las Cámaras del Libro, ya que la Catalana decidió unilateralmente dejar de hacer estadísticas y eso implicó que también nosotros dejásemos de hacerlas"

Emiliano Martínez
"No es de recibo forzar las reglas del juego"

El anterior presidente de la FGEE apuesta por recuperar el consenso antes de que la situación se agrave: "Yo no diría que la Federación está en crisis todavía, pero es un tema incómodo que ha estallado de manera inesperada. El espacio que la Federación viene ocupando desde hace años en la Feria de Francfort está en la zona comercial, ya que la Feria tiene otro espacio institucional que es el dedicado al país o cultura invitado en cada edición y que en 2007 será Cataluña. El problema es que mientras que en la Federación hay un criterio avalado para tomar decisiones de manera consensuada entre los dos grandes gremios, hubo un intento de forzar la situación rompiendo ese consenso y eso, más allá del motivo concreto, es menos de recibo todavía. El tema ha quedado para la reunión de la próxima semana, donde espero que se imponga la sensatez. Pero el hecho cierto es que se ha tratado de forzar las reglas del juego, ya que en lugar de buscar el consenso , fueron haciendo campaña con otros gremios y dejando al margen al madrileño. Ahora todo pasa por reconducir la situación por parte de todos, sin crear tensiones que lleven a cuestionar las reglas del juego que tan bien han funcionado todos estos años. No es más, pero tampoco menos".

Joaquím Palau
"El catalán es persistente en el trayecto"

Joaquim Palau, actual responsable de RBA, se confiesa ajeno al debate y al día a día de los gremios de editores: "Ignoro que hayan surgido problemas entre los de Madrid y Barcelona, aunque sí se que han existido diferencias entre el Gremio de Cataluña y la Asociación de Editores en Catalán ante la Feria de Francfort. De cualquier forma, seguro que sabremos superar las tensiones para que el próximo mes de octubre Francfort sea una fiesta para todos, los editores en catalán y en castellano. Porque los catalanes podemos ser muy insistentes a la hora de negociar, algo pesados en el trayecto, pero sabemos llegar a acuerdos sensatos. A fin de cuentas, la Feria alemana es un universo por definición, la cultura también es universal, y la protagonista de este año, la cultura catalana, que ha formado parte durante más de doscientos años de un estado más complejo, tiene un camino particular histórico y editorial lo suficientemente potente como para que se reconozca su peso en la edición mundial. Pero sin discusiones bizantinas, ni polémicas innecesarias.

Jordi úbeda
"Ningún Gremio debe quedar aislado"

Recién nombrado presidente de la FGEE, Jordi úbeda reconoce el conflicto pero lo minimiza: "No existe división sino un problema interno en el seno de la Federación que desgraciadamente ha salido a la luz. Yo, que estoy en medio, intentaré que vuelva la paz, porque debemos seguir hablando para que nadie se sienta herido ni ofendido, y resolver si hay intercambio o no entre los stands, como ha solicitado el Gremio de Cataluña para que todos los editores en catalán puedan estar agrupados en un mismo sector. Sí es cierto que desde la FGEE siempre se han adoptado las decisiones por consenso , y que quizá lo que nuevo fue el procedimiento, que el Gremio catalán se reuniese con todos los gremios del resto del Estado a excepción del de Madrid. Y esto es lo que no debe ocurrir, que un Gremio se sienta aislado, así que debemos recuperar el consenso. Los gremios de Madrid y Cataluña, por su importancia, deben alcanzar un acuerdo lógico, ya que generan el 90 de la producción y facturación editorial. Pero siempre hay gente con ganas de enredar un asunto que se ha hecho grande sin necesidad, y que debe reconducirse. Tengo una idea muy clara: Francfort es sólo un año, ya pasará, aunque no todos queden contentos, pero tenemos problemas que afectan a todo el sector, como la aplicación de la nueva ley del libro, la de la propiedad intelectual, la situación de las bibliotecas...Tal vez nadie quede contento, pero solucionaremos el problema.