El año pasado, 750.000 personas participaron en la FIL

El programa PICE de AC/E apoya la participación en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara del escritor Eloy Tizón, del científico Javier Fernández Panadero y del ilustrador Miguel Gallardo. | Más de 600 escritores de 43 países intervendrán en esta cita literaria, una de las más importantes del mundo en español.

Veintiocho ediciones cumple ya la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, a estas alturas una de las citas literarias en español más importantes del mundo. Argentina será el país invitado (por segunda vez), si bien la feria vuelve a tener el carácter internacional de otras ediciones: más de 1.000 actividades, más de 600 escritores, más de 20.000 profesionales del libro acreditados, 552 medios de comunicación de todo el globo, y la expectativa de superar los 750.000 visitantes del año pasado. España, invitada de honor en 2000, estará bien representada, y no solo por el lado de la literatura: el Programa para la Internacionalización de la Cultura Española (PICE) de Acción Cultural Española apoyará, además de la participación del escritor Eloy Tizón, la del científico Javier Fernández Panadero y la del ilustrador Miguel Gallardo.



El autor de Técnicas de Iluminación tiene varios actos programados: un encuentro con estudiantes mexicanos de preparatoria; una mesa redonda en torno a la situación actual del cuento con Juan Casamayor, Isabel Mellado, Paola Tinoco y Andrés Neuman; el Encuentro Internacional de Cuentistas, moderado por Ignacio Padilla, donde leerán sus relatos Liliana Heker, Ronaldo Correia de Brito, Felipe Garrido y el propio Tizón; y por último una charla sobre "El placer de la lectura", coordinada por Benito Taibo, junto a Alberto Chimal y Andrés Neuman. "Creo que este tipo de eventos -comenta el escritor a El Cultural- sirve para darse a conocer, acercar nuestros libros a un público receptivo, además de fomentar el intercambio literario y humano, debatir con otros escritores, editores y periodistas y, si es posible, extender redes afines de amistades y complicidades". Confiesa Tizón que no le importa interrumpir la escritura durante estos viajes -digamos- de trabajo, en donde, no obstante, toma notas "que luego, si hay suerte", utiliza en futuros escritos. "No es momento de encerrarse sino de salir al exterior y dedicarse a mirar, pasear, saborear lo nuevo, disfrutar de los estímulos inesperados y no dejar de emocionarse ante la infinita variedad del mundo. Todo lo cual, finalmente, son experiencias que a la larga repercuten de forma beneficiosa en la escritura".



El mercado del libro español mira con cada vez más interés la cita mexicana, en donde este año presentarán sus novedades unas cien editoriales de nuestro país. Según datos del Gremio de Editores, Iberoamérica es el segundo destino de las exportaciones del sector del libro español, que alcanzaron los 173 millones de euros en 2013. Por si fuera poco, México, país anfitrión de la Feria, ocupa el primer lugar entre los consumidores de literatura española al otro lado del Atlántico, con un gasto anual de 47,24 millones de euros en literatura española.



Ciencia y novela gráfica

Javier Fernández Panadero -que publica su trabajo divulgativo, desde hace años, en Páginas de Espuma, con títulos como ¿Por qué el cielo es azul? o ¿Por qué la nieve es blanca?- advierte de la importancia de ampliar los márgenes de la feria más allá de la literatura. "La ciencia es pura magia, pero magia de verdad, de la que funciona. Sabemos enviar objetos al espacio, manipular los átomos, curar enfermedades... Leer esto es apasionante y es de justicia y un honor estar incluidos en la FIL", dice. El científico, licenciado en Ciencias Físicas y profesor de tecnología en una escuela secundaria, está especializado en el acercamiento de la ciencia a niños y adolescentes, y su participación en la FIL, que contó el año pasado con la participación de casi 160.000 niños, supone, dice, una oportunidad perfecta para dar a conocer su obra. Fernández Panadero hará experimentos en directo y explicará "cómo puede entenderse el mundo a través de la ciencia, cómo puede cambiar nuestras vidas y, sobre todo, qué divertido y fascinante es hacer todo eso por uno mismo".



Esta es la segunda ocasión en que el ilustrador Miguel Gallardo viaja a México a un evento de carácter literario. El año pasado participó en el Hay Festival, de Xalapa, en el que, como en la FIL, se han incorporado "nuevos lenguajes" como el de la novela gráfica. "Creo que contar historias no tiene límites -dice el autor de Makoki (Mondadori)-: lo que importa es que sean buenas historias que hablen de nuestro mundo y nuestro tiempo". Gallardo, cuya última obra, Aquí vive Dios, trata de difundir la importancia de la cooperación internacional, cree que en España aún se da la creencia de que el cómic pertenece "a una cultura menor". Por eso celebra su inclusión en el programa de la FIL, en donde tendrá la oportunidad de "acceder a todo el público que no lee comics o al público que solo lee libros pensando que la mezcla de imágenes y texto empobrece, cuando lo que hace en realidad es multiplicar las vías de comunicación".