Documentos medievales, libros de horas, incunables, atlas, grabados de los siglos XVI y XVII, ediciones contemporáneas de libros de arte ilustrados por pintores de vanguardia del siglo XX… Este rico corpus que conforma la historia de la bibliografía de nuestra civilización se da cita hasta el próximo domingo en el Salón del Libro Antiguo de Madrid, que un año más se celebra en la Galería de Cristal del Palacio de Cibeles. 25 libreros anticuarios españoles y extranjeros, de países como Argentina, Austria, Portugal o Gran Bretaña, serán los cicerones, encargados de ofrecer al público la ocasión de adquirir auténticas joyas de bibliofilia.
“Es una ocasión única para poder admirar y comprar ediciones de gran calidad y rareza, que cada uno de los libreros anticuarios participantes han seleccionado para esta edición”, explica el presidente del Gremio de Madrileño de Libreros de Viejo, Manuel Sánchez Llorente, quien equipara esta feria, la más importante del territorio nacional, “con las que tienen lugar en capitales europeas del libro como Londres, París o Milán”.
Y es que aunque uno de los objetivos primordiales del evento es dar a conocer la riqueza documental y bibliográfica de nuestra cultura, la feria también tiene un importante componente comercial. “Incunables, góticos, atlas y grabados de los siglos XVI y XVII con ediciones de clásicos del Siglo de Oro, así como grandes obras de la imprenta de la Ilustración realizadas por maestros impresores como Ibarra y Sancha serán algunas de las sensaciones de esta edición”, resume Sánchez Llorente, que añade “las primeras ediciones de los escritores del siglo XIX, de la generación del 98 y del 27, muchas de ellas con exquisitas encuadernaciones de distinguidos artesanos antiguos y modernos” como algunas de las piezas más cotizadas.
Bibliofilia para principiantes
Además de la parte de venta, la feria conjuga elementos expositivos y educativos, como el espacio Iniciación a la Bibliofilia, una puerta de entrada al apasionante mundo de la bibliofilia, donde el público encontrará libros a precios muy asequibles, aportados por los libreros del Gremio. Asimismo, habrá un Taller de Encuadernación que enseñará al público el delicado trabajo de los profesionales del gremio así como a distinguir los diferentes estilos y formatos presentes en el mundillo.
Dentro de la feria también se enmarca la exposición Trajes y tipos populares españoles, que recoge una colección de libros ilustrados, grabados y litografías de los siglos XVIII y XIX realizados por artistas españoles y extranjeros y muestra los trajes y las costumbres de nuestro país en aquellos años. Ilustraciones de contrabandistas, toreros, majos y vendedores callejeros se pueden ver en el recorrido, que acoge obras de uno de los primeros representantes de este género, José Domínguez Bécquer, del francés Pharamond Blanchard y del inglés John Lewis.También se muestran grabados de Juan de la Cruz Cano y Antonio Rodríguez en las que quedaron plasmadas las vestimentas de los personajes españoles de diferentes clases sociales de hace tres siglos.
“Todas las ilustraciones están acuareladas a mano de época, y reflejan la visión que se tenía de la sociedad española, contribuyendo poco a poco a crear la imagen romántica del país y a fijar los personajes tópicos y típicos de este género: el contrabandista, el torero, los majos, los vendedores callejeros, etc.”, concluye Sánchez Llorente.