La agente literaria Antonia Kerrigan falleció este jueves en Barcelona a los 71 años, según comunicaron su familia y su agencia literaria, que representa a 150 escritores, algunos de ellos tan leídos como María Dueñas, Sergio Ramírez, Juan Gómez-Jurado o Eva García Sáenz de Urturi. Kerrigan fue agente también del fallecido Carlos Ruiz Zafón, autor de La sombra del viento, que se tradujo a treinta y seis idiomas, y discípula de Carmen Balcells.
La empresaria ha muerto tras unos meses de enfermedad, según ha informado su agencia literaria, que ha lamentado su muerte y ha agradecido "sus enseñanzas, su cariño y la guía que fue en el mundo editorial".
Nacida en París, aunque nacionalizada estadounidense, Kerrigan creció en un entorno bibliófilo. Su padre, Anthony Kerrigan, fue poeta y traductor al inglés de las obras de Unamuno y el primer traductor al inglés de Borges y Neruda. Su madre, pianista, formó parte de la orquesta sinfónica de Chicago y fue también la traductora de Cortázar al inglés. En los años sesenta, la familia Kerrigan se trasladó a vivir a Mallorca, y allí conocieron a autores tan influyentes como Camilo José Cela, Carlos Barral, Américo Castro o Jaime Gil de Biedma.
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Kerrigan se estableció en Barcelona en la década de los 70 para estudiar Medicina, pero abandonó carrera en el cuarto año. Fue cuando Balcells le propuso trabajar con ella en su agencia literaria. Tras unos años a su servicio, Kerrigan abriría, a finales de los 80, su propia agencia en Barcelona, que representa a autores en lengua castellana para todo el mundo, así como a otras agencias y editoriales extranjeras en España.
Durante los primeros años compatibilizó su carrera como agente con la de traductora del inglés al español de obras de ficción como Vals y su invención, obra teatral de Nabokov; Hija del crepúsculo, de V. C. Andrews; Peligro en la Red, de Bethany Campbell o El canto del Ruiseñor de Constance O'Banyon.
Hasta el momento de su muerte, representaba a autores de diferentes estilos literarios, tanto de ficción como de no ficción, entre ellos el escritor nicaragüense y Premio Cervantes Sergio Ramírez, que en su cuenta de Twitter ha recordado que además de su agente por 25 años fue "una entrañable e incomparable amiga".
Gómez-Jurado la ha recordado como "la agente literaria más grande en lengua castellana" y un miembro más de su familia. "Estamos de luto por una pérdida irreparable, tanto para nosotros como para el conjunto de la literatura en español. Todos los que la conocíamos y queríamos lamentamos su marcha y tenemos el corazón destrozado", ha concluido.
Kerrigan fue también agente literaria de Cela, reconocido con el Premio Nobel de Literatura, y de su hijo. El ministro de Cultura, Miquel Iceta, también la ha despedido en su cuenta de Twitter: "Que la tierra le sea leve", ha escrito.
El madrileño Antonio Gómez Rufo ha lamentado también su fallecimiento, considerando que es un "inesperado día de profunda tristeza". Por su parte, Jorge Volpi la ha recordado como una "agente ejemplar, aguda lectora, amiga divertida y generosa que hace 25 años confió en mí como nadie, nuestra 'mamá gallina', ha dicho.
La editorial Planeta aseguraba que Kerrigan fue una "figura clave en el mundo editorial". La agencia de Antonia Kerrigan representa a otros escritores como Laura Freixas, José María Merino, Laura Restrepo, Vanessa Montfort o Javier Sierra, entre otros.