El amanecer de los vivos

¡Hola!

Han estado muy cerca de ganar estos poemas:

PilarAlejos
Persigue salamandras azules / si llueven ocasos líquidos / sobre las venas de la ciudad.

Imágenes sencillas y muy plásticas, como esas “salamandras azules” que aparecen en esos sugerentes “ocasos líquidos”. El cierre redondea el poema con un discurso que aún es metafórico, pero con un tono más explicativo. Poema equilibrado de belleza serena.

Giulia
En un largo crepúsculo de piedra / ángeles sin sombra custodian / las ruinas del fuego.

Cada imagen es un golpe simbólico –“crepúsculo de piedra”, “ángeles sin sombra”, “ruinas del fuego”-, que, enlazados entre sí, van creando un juego de ecos y de espejos con una elegancia rotunda y perfilada. Buenas imágenes, cerradas, sobrias y creativas.

JiV
El hálito de un gusano forja en la mente reductos / crepitantes de fieras voladoras / aferrándose a la luz.

El feísmo de ese “hálito de un gusano”, parte de esa repugnancia para ir creando imágenes que contrastan, como esos potentes “reductos / crepitantes de fieras voladoras”, que nos sacan de esa primera sensación, antes del lúcido esplendor final.

Pero el ganador es:

PabloCavero
Atravieso las murallas de mi corazón// buceo en la playa de mi pulso caníbal// y me ahogo en mis pulmones de cicuta.

Cada verso es una creación poética exenta. El primer verso, más transparente en su interpretación, con un pulso comunicativo logrado y directo. Sin embargo, eso contrasta con el segundo verso, de una arrolladora tensión metafórica, esa “playa de mi pulso caníbal”, antes del cierre en la devastación. Juego de contrastes, con su fuerza verbal.

Tema de la semana: “El amanecer de los vivos”. Porque hay un amanecer pendiente de los vivos. Los que eligen estar de otra manera, con la rosa de la única pasión entre los dientes de alegría. No lo establecido, ni lo previsible. Lo que se ofrece intacto en su belleza, lo que no se comprende, ni comparte, y nos hace felices. Escribamos de eso, en 3 versos, con no más de 140 caracteres. Escribamos de aquellos que aún eligen vivir.