Eva Belmonte
Empresarios indultados por sus propios hermanos, patios de colegio en los que jugaron juntos la mayoría de los miembros de la élite político económica, contratos públicos sin concurso a porrillo... España es un oscuro tablero de Monopoly al que sólo ha sido invitado un selecto grupo de jugadores. La periodista Eva Belmonte (Elche,1982) se coló en la partida armada con su afilado pluma y con la contundencia del BOE. Con el BOE sí, es increíble lo que una lectura atenta puede encontrar allí. De hecho, lo que hace la autora de Españopoly es llevar a la distancia larga del libro lo que ya practica con éxito en el suculento blog El BOE nuestro de cada día. Una de esas ideas que le dejan a uno cariacontecido y exclamando: "¡Por qué diablos no se me ocurrió a mí!"Así, Belmonte va descubriendo un sinfín de barbaridades que ensucian la política del país y que no están precisamente ocultas bajo siete llaves. Sólo hay que ir a buscarlas para ver cómo van desfilando por la negra pasarela de estas páginas los jugadores que se reparten el botín, los abrevaderos de los poderes públicos para uso de los fieles, las célebres puertas giratorias entre la administración y la empresa privada, los bailes de sillas, los repartos africanos de las cajas y, de colofón, el lamentable espectáculo del camino -breve- de la cárcel al indulto. Al final del libro ya no le quedan a uno ganas de jugar.