Tras disfrutar de las correrías del intrépido Antonino en rescate de su amigo herido o colmarlo con los manjares más exquisitos, nos llega ahora la tercera entrega de este divertido hombrecillo en la que se verá obligado a coincidir en los sueños con su inseparable compañero Oso, al dormir ambos en el mismo dormitorio. El problema surge cuando Antonino se sueña héroe de las hazañas más fantásticas repentinamente interrumpidas cuando Oso aparece en escena, robándole el protagonismo del momento. Así, irá huyendo "de sueño en sueño" hasta que realmente se encuentre solo y en apuros dentro de un avión averiado en pleno vuelo. Entonces, descubrirá que las fantasías en común pueden ser mucho más divertidas. Una sencilla historia para que los más pequeños aprendan el valor de compartir.