Tan tarde para salir y hacer lo que más nos gusta, tan tarde se pone oscuro o simplemente hace frío… Las excusas se multiplican mientras el pequeño Ricardo se desespera porque "Tan Tarde" parece un lugar que se le hubiera vedado mientras que el resto de los adultos lo transitan a sus anchas.



Sin embargo, llega el momento en que el niño reúne el valor para encaminarse hasta este mítico destino de la mano de un oso en bicicleta, un gato blanco y una señora ciervo. Una compañía singular con la que se siente protegido y recorre kilométricos caminos hasta llegar a Tan Tarde, donde son acogidos por sus festivos habitantes.



La autora italiana recrea con acierto esta hermosa fábula sobre cómo los lugares prohibidos se tiñen con un halo de misterio que los vuelve más deseables, y sobre cómo los sueños nos permiten viajar hasta ellos.