Nos encontramos ante un relato premiado y traducido ya a diversas lenguas que nos traslada hasta una pequeña comunidad de colonos en la Nueva Inglaterra del siglo XVIII, una tierra hostil que ha ido erosionando el carácter de esta sociedad ultraconservadora en la que la joven Judith nos abre su intimidad a través de la primera persona. Retazos fragmentarios de escritura que dirige a su gran amor, y saltan a distintos momentos del pasado, obligándonos a recomponer una trama dominada por el suspense y el ostracismo de la narradora con el que cualquier adolescente se podrá identificar.
Prueba de ello son la misteriosa aparición de una muchacha muerta en el río, el secuestro de la propia protagonista que es tratada como una paria al volver al pueblo mutilada, o la historia de amor con Lucas que habrá de pasar todo tipo de pruebas hasta su consumación final.