Trad. J. L. Gabriel López. Punto de lectura. 1.127 páginas,1.350 ptas.
Apenas si hace un año que la última novela del exquisito Tom Wolfe se tradujo al español y ya contamos con la correspondiente edición de bolsillo. Ello, da buena idea de la fuerza que este autor -junto a Grisham y King, entre otros- tiene entre los lectores de nuestro país. Escrita en el más puro estilo del "Nuevo periodismo Todo un hombre denuncia el mundo de valores corrupto y vacío que caracteriza a parte de la sociedad norteamericana, ajena a cualquier tipo de valor moral. El lienzo en el que Wolfe sitúa a sus personajes es similar al que ya conocimos en La hoguera de las vanidades. Ahora el protagonista es Charlie Croker, un hombre de 60 años, dueño de un imperio inmobiliario en Atlanta, que se ve acosado por las deudas que ha contraído con un banco y ve cómo su vida, tanto personal como profesional comienza a desmoronarse y se le escapa como arena entre los dedos. Roger White II, un abogado negro, y el íntegro Conrad Hensley, empleado de Charlie, serán los acompañantes del protagonista en su agónico descenso a los infiernos.