Premio Ciudad de Barbastro. DVD. 188 páginas, 13 euros



Es poco frecuente una trayectoria como la de esta narradora madrileña (1970), erizada con títulos y reconocimientos que destacan la calidad de su escritura y reafirman su tesón por ofrecer relatos valientes en sus enfoques, nada convencionales en su diseño.



Las páginas de Cenicienta en Pensilvania contienen un formato que no se lo pone fácil a lectores cómodos, a medio camino entre el story board cinematográfico y la sucesión de secuencias que registran el testimonio de voces aportando distintas versiones de quién fue la protagonista de esta historia cuyo 'montaje' se nos encomienda, cuando acabamos su lectura. Se trata de la vida de Mary: éxito y fracaso. Es la historia de un mito del cine sirviendo de cauce a tantos relatos sobre la formación de la identidad. Mary no conoció a su padre, lo que no impidió que se lo inventara, y ahora busca a su madre, y a sí misma. Con 17 años se enamora de un magnate del cine, pero es frío, y ella necesita la mirada de otro hombre, impetuoso y cálido. Tampoco este le sirve, ni es ese el verdadero asunto. El asunto es su historia, la imposible conciliación entre ficción y realidad. Todo acompasado por una banda sonora triste que subraya su soledad.