Houdini, el rey de las esposas
Jason Lutes y Nick Bertozzi. Astiberri. Bilbao, 2007. 94 páginas. 16 euros
19 julio, 2007 02:00Los lectores aún no familiarizados con Jason Lutes (New Jersey, 1967) harían bien en hacerse con la notable Juego de manos (La Cúpula), y con el primer álbum de Berlín (Astiberri). Lutes posee una medida de los tiempos narrativos fuera de lo común, en la que los insertos y planos detalle cumplen una función narrativa de primer orden, actuando como auténticos puntos de sutura que confieren tanto sentido a las secuencias como sus medidos diálogos.
Sabíamos de su admiración por la magia, y muy en concreto por Houdini, de manera que no nos sorprendió que recurriera a otro joven valor en alza, Nick Bertozzi, para narrar unas pocas horas de aquel brillante rey del escapismo, concretamente su salto a las heladas aguas desde el puente Hardvard de Cambridge, Massachussets, un 1 de mayo de 1908. Sobre un preciso layout de Lutes, Bertozzi, del que habrá que hablar cuando Astiberri edite El Salón, hace un ejercicio tan preciso como lo era el tiempo que Houdini necesitaba para desembarazarse de sus ataduras en las situaciones más complicadas, y, a través de una anécdota, traza una semblanza que nos ayuda a comprender su éxito y su también calculado manejo del espectáculo para atraer a unas masas ávidas de hacer a figuras como él depositarias de su capacidad para el asombro y la ilusión, lo que justificaría su pervivencia en nuestro recuerdo.
Pero, más allá del ejercicio sobresaliente y del rendido homenaje, en este libro, lleno de suspense, hay un canto a la complicidad de Houdini y su compañera, Bess Rahner, que es por donde asoma el Lutes de los sentimientos. por F.H.C