Image: Lista de esperas

Image: Lista de esperas

Poesía

Lista de esperas

Miguel Albero

24 julio, 2015 02:00

Miguel Albero. Foto: Carlos Díaz

Abada. Madrid, 2015. 104 páginas, 14€

Lista de esperas es el segundo libro de poemas de Miguel Albero (Madrid, 1967), autor de varios libros de narración (Principiantes: inventarios de comienzos sin final feliz, 2002) y ensayo (Instrucciones para fracasar mejor, 2013), que, al igual que aquel, gira en torno al tiempo. En el primer poemario, Sobre Todo Nada (2011), un personaje con nombre y apellido, un enfermo sin curación, a la espera de la muerte, era quien redactaba los poemas en esa situación dramática. Aquí, con bastante desenfado en no pocos momentos, los poemas hablan también de la espera, de las múltiples ocasiones en que se está a la espera. Así, aunque cada uno a su manera, se trata de libros de poesía unitarios.

La espera, las esperas: la de quien en un andén espera a un ser querido, a coger el tren o la de quien piensa arrojarse a las vías, la del jugador mientras gira la bola en la ruleta, la del preso en el corredor de la muerte, quienes esperan en la antesala de consulta, la espera a ser descubierto de quien infringe las normas, la de quien sueña con la gloria, situaciones tan cotidianas. Pero también tomadas de episodios históricos o literarios, como la espera de Aníbal teniendo Roma a su alcance y que le llevará al fracaso; o la de Penélope, quien dice que no deseaba el regreso de Ulises sino librarse de su tarea de tejedora en un poema y, en una segunda versión, expresa su añoranza del telar. También la distancia entre "espera" y "esperanza" o lo absurdo de expresiones relacionadas con el tema como "hacer tiempo": "hacer tiempo es perderlo, es malgastarlo".

Lo anterior pretende dar idea de lo variado de los poemas de este Lista de esperas, en los que está muy presente el humor, una cierta burla sobre tantas y tantas ocasiones en que algo se espera, un algo que no llega y, dice un poema, "el tiempo de esa espera habrá pasado, sí/ pero también el de vivir, tu vida". Y es que, más allá del tono desenfadado general, el diplomático y escritor Albero invita a una reflexión sobre el tiempo, el tiempo que no puede sino identificarse con la vida para decir tiempo de espera, tiempo no vivido, tiempo muerto, vida muerta. Con este libro hermano del anterior, a la vez que su contrapunto y complemento, Albero muestra bien su destreza como poeta.