Opinión

Adiós al héroe de las mujeres

14 marzo, 1999 01:00

Caen en mi papelera, como al azar, más quejas por la insaciable voracidad de los familiares y nietos de, con la complicidad de los y las agentes. Torrente no es el primero ni el más suculento despojo que se disputan a muerte varios editores...

Y al final hemos perdido también al héroe de las mujeres, Adolfo Bioy Casares. Una obra espléndida, un amigo generoso y una vida apasionante, sobre todo una vida. ("¿Adolfito?: un bala", remataban con satisfacción las mujeres más sofisticadas de Buenos Aires). Ahora mismo se habrá unido a Borges en ese orbe de símbolos que a veces era Usigro Parodi, Bustos Domecq y el Bojarí. Esperemos que entre los nietos y los hijos de última hora se pongan de acuerdo, al menos allí, sobre los derechos de su obra.

Gonzalo Pontón, tras el berrinche de su marcha, va y se lleva a los suyos, y compra, con la ayuda de Planeta, la Crítica de su alma. Le siguen todos, desde Francisco Rico y sus clásicos a los responsables de su excelente colección de Historia. Me dicen que, a pesar de todo, los mondadoris italianos no tuvieron que disfrazar la pena, contentos de centrarse en lo que les importa, su expansión por Hispanoamérica, a pesar de algunas intoxicaciones interesadas.

Y , ¿para cuándo el estreno -ya no esperado, sino esperadísimo- de la última película de Imanol Uribe? Me dicen que el director ha dado un giro de 180 grados, que se ha vuelto mucho más intimista y complejo, que va a sorprender a propios y extraños con algo que no tiene absolutamente nada que ver a lo que había realizado hasta hoy. Así que olvídense de reyes pasmados, lunas negras, adioses varios y días contados. Quizá en abril salgamos todos de dudas.

Hablando de tardanzas, me extraña también que lo último de José Luis Cuerda, "La lengua de las mariposas", no haya desplegado ya sus alas, sobre todo cuando hace dos meses que se anunció su llegada a nuestras carteleras. Basado en un relato de Manuel Rivas y con Fernando Fernán-Gómez al frente del reparto, esta lengua promete.
Ni dibujado podría ocurrírseme un premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades mejor, ni más justo. Antonio Mingote opta al premio y yo, qué quieren que les diga, me alegro por lo mucho que nos ha acompañado y conmovido a todos con su pincel siempre agudo, siempre libre, siempre honesto.
Ahora que José Hierro acepta ser candidato a la Academia, pocos serían vistos con más agrado que la imperturbable Carmen Martín Gaite, doña erre que erre. Mientras su "hermana pequeña" echa a correr por España, mientras sigue Carmiña traduciendo a Jane Eyre, van y le estrenan en Italia su "Caperucita en Manhattan", una de sus novelas de más éxito. La compañía de marionetas de Stefania Colla es la culpable. Será el 10 de abril en Milán, y la escritora piensa acudir al estreno.

N o acaba uno de recibir sorpresas. Me dicen que la otra noche vieron cenando en Sevilla a José Saramago y Aquilino Duque, uno con su camisa roja y el otro con su camisa nueva. Ya me entienden ustedes. ¿Estaremos ante la versión literaria de la dichosa pinza?

Hace más de treinta años, el hoy triunfal Tom Wolfe llegó a Nueva York, con un traje blanco de invierno, en pleno verano, que no abandonó en meses. Desde entonces, jamás ha escogido otro color, porque, además de ser el favorito de Mark Twain, asegura que los trajes "son la personalidad" que "le dice a la gente cómo tratarle y lo que esperas de ella". Siempre tan dandy este Wolfe.

Puccini abandona su Torre del Lago y toma rumbo a la albufera valenciana. No hay nada como un viaje para que un político descubra la imprenta, el riego por goteo o lo que se tercie, incluso la ópera verista. Es lo que le sucedió a Rita Barberá en Italia. El Ayuntamiento valenciano quiso promover un Festival Puccini y entregó el encargo a Ramón Almazán, aficionado ilustre y persona muy ligada al Palau. Sobre el papel, todo perfecto, incluso para empezar la casa por los cimientos se ha preparado un ciclo de conferencias con los críticos más reputados. Sin embargo, problemas haylos; la prueba es que se han barajado ya varios nombres para la producción: Jorge Cuya, Carmen Rubio...

Despegan las "Líneas Aéreas" de Lengua de Trapo, un vuelo que ha reunido a setenta escritores iberoamericanos nacidos a partir de 1960. Algunos han publicado ya en España (Fuguet, Rodríguez Salvador, Andahazi, Iwasaki o Fresán, entre otros) pero la mayoría nos son a estas alturas aún inéditos. Me mandan la lista completa de pasajeros de este viaje y veo que falta, por ejemplo, Jaime Bayly, que dice, ay, que ya no vuela en clase turista. Lo que no sé es si, coincidiendo con los bolos de "Yo amo a mi mami", se dejará caer por el congreso que preparan mis lenguaraces amigos en mayo.

No lo crean ustedes: no se hace en Madrid tan mal teatro como dijo ese tal Mir en estas páginas. Y dijo más. El tricicle dijo también que descubrió en una biblioteca el "Don Mendo". ¡Qué lince! Once meses de éxito absoluto en el Español de Pérez Puig (Gustavo, no Gonzalo) la temporada pasada, y ni cuenta se dio el paisano. Claro que tampoco se dará por aludido si triunfa en Madrid Ingmar Bergman la próxima temporada teatral. Emilio Hernández, director del Centro Andaluz de Teatro, prepara una adaptación de "Escenas de la vida conyugal", y Alejandro Colubi pagará la producción.
Ya empiezan las quinielas de los premios Max. Una obra que brilla con mucho arte es la indiscutible favorita. ¿El morbo? Asegurado cuando su productor, adaptador, director y protagonista recoja el galardón o galardones en Barcelona, donde este año se celebran, frente a toda la profesión y los mandamases que lo excomulgaron.

E l Teatro Real siempre recala en mi papelera. Me cuentan que le siguen negando un coro estable. La comisión ejecutiva no llegó siquiera a tratar el asunto, pero ya son muchas las voces que claman que no puede haber un teatro de nivel sin un coro capaz de reponer títulos. Que el de la Zarzuela pueda intervenir de nuevo en "La Boheme" de las próximas navidades no ha sido más que una casualidad. Pero hay una voz que sigue empeñada en meter allí al de la ONE junto con la propia orquesta. Y es que con la ex ministra Aguirre perdió la batalla y desesperó, pero a ministro nuevo, escaramuza de siempre. A ver quién fana. Se admiten apuestas.