Opinión

Lucía y los notarios celestes

25 julio, 2001 02:00

Lucía Etxebarría manda una escritura notarial a la directora de estas páginas con "el objeto de conminarle a que se abstengan de publicar y difundir falsas noticias, hechos o simples rumores, meras invenciones o insinuaciones insidiosas" sobre su persona. Y todo por mi culpa, señores. Por los jocosos comentarios vertidos en esta vieja e inocente papelera palomera de opinión. Para el general disfrute, ahí va la prosa del notario Alberto Bravo.

Reproducimos a continuación algunos de los mejores párrafos, absolutamente literales, del escrito remitido por el notario:

«Durante estos dos últimos años, su revista ha difundido en la Sección "La Papelera de Juan Palomo" expresiones y hechos vejatorios sobre mi clienta; así y a modo de ejemplo, señalar el número de fecha 20 de septiembre de 2000 en el que se le llamaba "incendiaria de salón", u (sic) que se le calificaba de "astronauta" este trato vejatorio supone una violación del derecho fundamental al honor recogido en el artículo 18 de la Constitución Española.

Además, su publicación ha pretendido generarle antipatías con otras escritoras, de este modo, en 1999, en dicha columna se recogían unas supuestas declaraciones de mi mandante criticando a Almudena Grandes, siendo éstas absolutamente falsas y obligando a mi representada a aclarar públicamente la situación. Iguales artimañas utilizaron respecto a Espido Freire intentando un enfrentamiento entre ambas escritoras que, afortunadamente, no se produjo.

Por si todo ello fuera poco, a través de dicha sección se han desacreditado los premios y honores que han sido reconocidos a Lucía Etxebarría en virtud de su trabajo literario; de este modo, en el número de 14 de noviembre de 2000, cuestionaron la calidad de los Doctorados Honoris Causa que concede la Universidad de Aberdeen -considerada entre las cuatro más prestigiosas del Reino Unido-, cuando dicha distinción recayó en mi representada.

En el mismo sentido se han comportado respecto a la concesión del Premio Primavera de Novela, cuestionando el funcionamiento interno del mismo y sembrando dudas sobre su otorgamiento (cif): "Cuentan del presidente de un jurado que un día, tan enfadado estaba, que sólo se sustentaba con lo que por ahí maldecía. Traducción: dicen que dice Luis Mateo Díez que se retiró del jurado literario más primaveral cuando se propuso dar al premio a una novela de la que apenas se habían presentado 30 folios. Viendo como les lucía (se me escapa de todas todas la negrita) el pelo, se fue, se fue... Mas cuando el rostro volvió, halló la respuesta viendo que otro jurado iba maldiciendo...".

Mi representada, en multitud de ocasiones, ha puesto en su conocimiento sus quejas ante dicho tratamiento vejatorio. Sin embargo, nunca ha obtenido una respuesta satisfactoria por su parte, todo lo contrario, ustedes han respondido a sus quejas con más insultos y descalificaciones utilizando para ello el escaparate público que les brinda su publicación.

En este sentido, por ejemplo la contestación de Juan Palomo ante la protesta de mi mandante por el tratamiento recibido ante el otorgamiento del Doctorado Honoris Causa de la Universidad de Aberdeen: "P.D. Lucía, mi amor, perdona el ‘erupto’. Lo siento de verdad, querida Etxebarría, pero mi incontinencia y tu test tienen la culpa. ¿Fue para tanto dolor, amor, para tanto lamento? Que a mi Papelera le sobra humor y mala leche, pero no sabe ni de envidias ni de complacencias, Gaudeamus igitur, doctoranda. Todo fue en tu honoris".

Si bien en el pasado mi representada silenció sus protestas, en la actualidad no está dispuesta a continuar permitiendo dichos insultos y difamaciones, dándonos instrucciones expresas de proteger y defender su derecho al honor.

Es por este motivo por lo que les requerimos formalmente para que cesen dichas ilegítimas intromisiones a su derecho al honor; las alusiones de trato vejatorio, la publicación de noticias falsas o de meros rumores sin fundamento, las insinuaciones insidiosas... etc. En caso contrario nos veremos obligados a acudir a los Tribunales de Justicia para que sean éstos los que restituyan tal derecho mismo, la correspondiente indemnización por daños y perjuicios.

Adjunto cuatro folios de papel común con membrete de "Pique Abogados Asociados", que incorporo a esta matriz, de un resumen con objeto de que tenga conocimiento de la doctrina del Tribunal Constitucional respecto a los límites del derecho al honor y a la libertad de expresión y de opinión, que a buen seguro les hará replantearse el trato que desde su revista están dispensando a mi representada Lucía Etxebarría.

Dicha acta ha sido redactada conforme a minuta.»

Fin del acta notarial. Sin comentarios.