Menuda tormenta roja
Arriba, Natalie Portman, Javier Marías y Miguel Delibes. Abajo, Eduardo Punset y Antonio Saura
Una revolución de cine está en marcha. Punset, o cómo hacer de la divulgación científica el mejor espectáculo. Menuda tormenta roja: nieve en Madrid. Lo de Javier Marías y la Academia. La hija escritora del presidente (irlandés) arrasa. Won Kar-wai rueda su primera película en Hollywood. 300 gentes de la cultura, contra el desastre de la fraudulenta Fundación Antonio Saura.
Nada de lo que me comenten sobre la actividad de Eduardo Punset por difundir la ciencia me sorprende. El caso es que ni el éxito de Redes ni su bestsellero Viaje a la felicidad consiguen parar su maquinaria divulgativa. Me cuentan que prepara un encuentro multitudinario con científicos, sí, como si fuera un concierto pero con primeras figuras de la ciencia. Un éxito seguro.
Llega la tormenta roja. Y no me refiero a la vehemente afición española en Alemania, sino a las dos toneladas de nieve artificial que la artista belga Sophie Whettnall ha esparcido por la Casa de Velázquez de Madrid para rodar un vídeo que hoy proyectará por sus dependencias con la música de Luis-Fernando Rizo-Salom. También "intervendrá" Mayte Alonso con su "Arquitectura sonora", una sinfónica colaboración con Martin Herman orquestada con el movimiento del espectador, o sea, que no hay que perdérselo.
En inglés y escondido detrás de los libros más vendidos del New York Times Book Review encuentro una sorprendente recomendación de los editores del suplemento: El Hereje (The Heretic), de nuestro Miguel Delibes, aparece entre los libros "recientes" y de "particular interés". En su crítica la califican de novela "absorbente" y rica en detalles del estilo de vida del siglo XVI español.... Tarde pero por la puerta grande se cuela la última novela de Delibes. Pata negra.
La que les ha salido escritora a los irlandeses es la hijísima de su primer ministro, Bertie Ahern. Cecilia Ahern, de veintitantos, se ha convertido en una superventas. Si su ópera prima, traducida al español como P.D.: Te amo, se situó entrelos más vendidos, Where rainbows end, If you could see arrasa en Alemania.
Las reclamaciones de los países cuyo arte antiguo fue expoliado por los imperios europeos siguen no cesan. La penúltima pretende que el célebre busto de Nefertiti abandone el Museo Egipcio de Berlín y regrese al Cairo. Como los alemanes se hacen los suecos, Zahi Hawas, director del Consejo Supremo de Antigöedades, ha pedido el préstamo con un compromiso firmado de devolución. Y si pican, mejor que mejor.
Esta tarde, los señores académicos de la Española acogerán en su seno al escritor Javier Marías. Como va a la votación en solitario y los agentes de Prisa y adyacentes son mayoría en la casa, nadie vislumbra escollo alguno. ¿Por qué siempre ha de ser tan arriesgado, y caro, ir por libre? Recuerdo ahora con nostalgia a tantos nombres de nuestra literatura reciente... que me fumo un puro académico.
Aunque había anunciado que rodaría con Nicole Kidman The Lady From Shanghai, el director de De-seando amar, Wong Kar-wai, ha retrasado el proyecto para dirigir su primera película en Hollywood, My Blueberry Nights. No consigo dilucidar cómo adaptará su forma de rodar, casi sin guión, a la industria norteamericana, pero los actores, Jude Law, Ed Harris, Natalie Portman, Rachel Weisz y la cantante Norah Jones, están avisados.
Castilla-La Mancha inscribe oficialmente una fundación con el nombre de Antonio Saura, el Tribunal Supremo la ratifica... y lo hace sin el consentimiento de la familia. Lógicamente, las herederas se enfadan y toman medidas. Ahora han dado un paso más y han logrado una declaración firmada por los más variados agentes del mundo de la cultura, nacionales y extranjeros, que van desde Guillermo Solana, Tomàs Llorens o Francisco Calvo Serraller (tres de los impulsores de la medida), hasta Vicente Todolí, Guirao, Eulàlia Valldosera o Victoria Combalía, por nombrar sólo a algunos de los más de 300 que han estampado su firma en el documento.