Carmen Caffarel, Sofi Oksanen, Javier Panera y Teddy Bautista



Es una ocurrencia propia de la inefable Aído, pero ha sido Carmen Caffarel, máxima responsable del Instituto Cervantes, la que por lo visto ha tomado el relevo. Inasequible a los recortes presupuestarios que, como a todos, le afectan, sale ahora con una Guía de comunicación no sexista que pagará el Cervantes a la editorial Aguilar (a quién si no) y que saldrá en septiembre. Es un conjunto de "pautas y sugerencias para lograr un trato lingüístico más igualitario, que visualice por igual a hombres y mujeres, así como evitar y erradicar el sexismo en el lenguaje". O sea, que jóvenes y jóvenas están de enhorabuena, porque en la obra "se dispone y propone lo correcto, lo posible, lo preferido, lo aconsejado, o lo más adecuado".



Parece que a pesar de los 68.000 euros que Salamandra tuvo que pagar en la puja entre editoriales por Purga, de Sofi Oksanen, ha resultado un buen negocio: 32.000 ejemplares vendidos hasta finales de junio... ¿Se imaginan cómo deben de lamentarse los dueños de 451 Editores por haber despedido hace un año al equipo editorial del sello, que no sólo tenía contratado el libro por 3.000 euros, sino que ya lo había traducido en el momento del finiquito?



Es la pretemporada artística más movida que recuerdo. En Salamanca, Javier Panera deja el DA2. Javier González de Durana abandona la dirección del TEA de Tenerife y vuelve a casa: el 1 de agosto pone rumbo a Guetaria para pilotar el Museo Balenciaga. Paz Olmos se queda, como era de esperar, en la dirección del Museo de Bellas Artes San Pío V de Valencia. Aún está cavante la dirección de la Casa Natal de Picasso en Málaga. Y mientras, el suizo Moritz Küng, apenas sin trabajo en el Canódromo de Barcelona. ¿Quién programará en Galicia para el inmenso espacio de la Ciudad de la Cultura?



Se lo ha asegurado a un prestigioso crítico francés, Emmanuel Lubezki. El gran Terrence Malick aún sigue trabajando con los más de 600.000 metros de celuloide que filmó para El árbol de la vida y prepara una versión de seis horas del filme, que en su estreno en Cannes, donde obtuvo la Palma de Oro, era de 2 horas y 18 minutos. Teniendo en cuenta que la versión extendida de El nuevo mundo, editada en dvd, nunca llegó al mercado español, me pregunto si alguna vez podremos ver aquí este acontecimiento (o así) cinematográfico.



Cuando salgan estas líneas cualquier cosa puede haber ocurrido en la SGAE: quizá Teddy Bautista haya soltado la amarra que le unía a su despacho de control omnímodo, quizá se ha constituido la nueva Junta en la que ya nadie confía, o... El caso es que mientras escribo el desgobierno en la Sgae es absoluto. Pero, ¿no son responsables la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, y sus predecesores en el cargo? Todos, durante años, han dejado hacer y deshacer a los jerifaltes de la Sgae, mientras daban y daban privilegios y subvenciones.