Image: 30 céntimos

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Opinión

30 céntimos

22 diciembre, 2011 01:00

Portadas del archivo de El Cultural

La crisis económica ha obligado a la inmensa mayoría de los periódicos y revistas impresos de todo el mundo a tomar medidas para garantizar su continuidad, sin perder un ápice de calidad, provocación e interés. Muchas publicaciones culturales de enorme prestigio y trayectorias ejemplares han desaparecido, mientras que revistas y suplementos culturales de grandes medios internacionales, como el Washington Post o el Angeles Times, se han visto obligados a abandonar el quiosco y pasarse al digital sin concesiones. Es, dicen, el signo de los tiempos, aunque el lector español culto, que a menudo navega sin problemas por internet, sigue prefiriendo el papel como espacio de reflexión.

El propósito de El Cultural, revista de referencia de la vida artística y literaria española, es mejorar la calidad de sus contenidos, que es lo que ha mantenido año tras año la atención y la fidelidad de los lectores. El Cultural va a apostar a partir del año próximo por Orbyt porque las nuevas generaciones están ya en el periodismo digital y en la tableta, y El Mundo ha sido pionero en esta oferta clave para el lector. El Cultural ocupará lugar destacado en el quiosco digital de El Mundo a partir del próximo viernes y seguirá presente, con más fuerza y más lectores cada día, en su página web, que ya cuenta con más de medio millón de usuarios únicos.

También a partir del próximo viernes, al comprar El Mundo, el lector deberá abonar la cantidad casi simbólica de 30 céntimos más para llevarse El Cultural. El desafío de hoy implica la complicidad de los lectores, que desde ahora serán, seguro, más interesantes e interesados que nunca. Lectores cómplices, que exigirán más y nos harán mejores. Estamos seguros de que comprenderán la necesidad de este mínimo esfuerzo económico, que nos permita mantener la independencia y la pluralidad de nuestros críticos, que nos ayude a seguir siendo testigos libres de los logros y las trampas de nuestra vida cultural y, en definitiva, a mejorar la calidad de la revista, en beneficio de todos los que nos siguen y nos leen.

La situación económica actual, tan preocupante, no debe socavar estos años de creación, de esfuerzo y de buenas ideas de muchas personas que han derivado en una industria cultural muy importante en nuestro país. La cifra es elocuente: la cultura aporta el 4% del Producto Interior Bruto español y genera 750.000 empleos. A los escritores y cineastas, a los artistas y dramaturgos, a los músicos, editores, galeristas, libreros, periodistas, lectores... nos va mucho en ello. Nos necesitamos unos a otros, porque sabemos muy bien que la creación cultural cuesta dinero y que, por lo tanto, hay que pagarla.

A lo largo de varios lustros El Cultural ha quebrado costumbres y ha asumido retos. Éste de hoy es especialmente importante para nosotros: desde el próximo viernes, al comprar El Mundo habrá que pagar 30 céntimos más para llevarse El Cultural.