Image: Un libro necesario

Image: Un libro necesario

Opinión

Un libro necesario

Por Agustín Fernández MalloVer todos los artículos de 'Ctrl+Alt+Supr'

25 enero, 2013 01:00

Agustín Fernández Mallo


A finales del pasado año vio la luz Libro de ausencias (Tusquets), de Antoni Marí. Partiendo de un hecho trágico, la muerte de un amigo, una lectura de Venganza tardía, de Ernst Jünger, la visita a la exposición de Lúa Coderch, Estrategias para desaparecer, y de un momento epifánico revelado en mitad de la calle donde, "las casas, las ventanas, los coches aparcados y las personas se me hicieron lejanos, extraños a mis hábitos y a las costumbres de mi mirada", todo pierde de pronto sentido para el narrador y aparece lo que él denomina "estado de ausencia". A partir de ese momento, y buscando respuestas, el libro es un viaje físico y sentimental, de pulso metafísico tremendamente intelectualizado sin que por ello se nos presente como angustioso y muy realista, por multitud de autores que han representado tal estado de ausencia, especialmente provenientes de la poesía francesa y del romanticismo alemán, pero también monjes como Ramon Llull o poetas como Valente. En poco más de doscientas páginas, y haciendo gala de una desbordante erudición, compendia no sólo datos y textos, sino el pulso romántico: la aprehensión de un Todo en una única experiencia [no ajena, por cierto, a autores tan aparentemente alejados de Marí como, por ejemplo, David Foster Wallace]. La peripecia del narrador se lee como si de un libro de aventuras se tratara. Libro de ausencias posee además algo que hacía mucho tiempo que no veía en la literatura española: la puesta en práctica del método paranoico-crítico que en su día definiera Dalí; una clase de pensamiento analógico al que soy especialmente afecto. Un libro necesario por cuanto personalísimo y radical. Cojonudo.