Sonic the Hedgehog nos devuelve al erizo azul mas rápido de la historia y sus plataformas 2D

Existen dos tipos de infancia: la infancia pasada con consolas de Nintendo y la infancia pasada con consolas de Sega. Como orgulloso representante de los segundos, cada vez que aparece una versión o un remake de alguno de los juegos clásicos de Mega Drive y Master System, no puedo evitar sentir algo de nostalgia. El lanzamiento de hoy en Google Play es uno de ellos, si bien en este caso no se trata de una remasterización (léase maltrato) de un clásico, sino una versión muy fiel del original: Sonic The Hedgehog.

Sonic the Hedgehog era todo lo que no era Super Mario. Rápido, chulo, y con un claro estilo noventero que aún perdura hoy en día. También era excepcionalmente difícil, debido a la mencionada rapidez que impedía seguir el escenario y los peligros. Todo eso implicaba una mecánica de prueba y error, que a veces se juntaba con la suerte pura y dura. Es cierto que visto en perspectiva se trata de un estilo de juego algo frustrante, pero en aquel momento todos nos quedábamos anonadados ante la velocidad a la que ocurría todo.

A partir de hoy podemos disfrutar de nuevo de este clásico. Ya teníamos en Google Play Sonic 4, el intento de la compañía de volver al estilo original de plataformas en 2D en escenarios veloces, pero la verdad es que no hay nada como el original. Los gráficos en 2D han sido mejorados aprovechando la potencia de las nuevas gráficas de smartphones, pero por lo demás es exactamente igual. Las diferencias jugables son anecdóticas, como la posibilidad de jugar como Tails, el amigo de Sonic (algo que solo fue posible a partir de la segunda entrega de la saga).

Sonic the Hedgehog es un buen chute de nostalgia para todos aquellos segueros que quieren volver a entrenar sus pupilas, o para los nintenderos que quieran saber porqué se convirtió en una saga tan famosa. El resto de jugadores tal vez se frustren con la dificultad, pero en todo caso será una buena experiencia una vez entren en calor.