El Real Madrid tiene la plantilla de la próxima campaña prácticamente cerrada. Dos fichajes se han incorporado ya al club y tratarán de sumarse a una de las etapas más exitosas de la historia de la sección de baloncesto.

El conjunto entrenado por Pablo Laso ha marcado una época pero también un estilo. Un entrenador que no es resultadista -como el mismo se ha calificado en cientos de ocasiones-, y que cuenta con todos y cada uno de los componentes de su plantilla. Estudiar al rival para confiar en unos u otros jugadores es el guion seguido por el técnico vasco.

Además de su impronta en las canchas, también la ha dejado por los despachos. Y es que este Real Madrid, con Laso, Herreros y Juan Carlos Sánchez al frente de la gestión, ha confiado por remodelar poco a poco la plantilla. Los últimos seis o siete fichajes así lo demuestran. Salvo dos excepciones, todos tienen 26 o menos años. Un tope muy bajo en el mundo del baloncesto y que asegura el desarrollo del equipo blanco en las próximas temporadas.

Solo dos excepciones por encima de los 26 años

El curso pasado llegaron Causeur y Kuzmic por encima de dicho tope. El francés, ahora con 31 años, y el interior con 28, son de las pocas incorporaciones que no cumplen el requisito. En el mismo año llegó Campazzo repescado con 26 años, sumándose a los 20 de Yusta y a los 18 de Radoncic. 

A lo largo del año, y como consecuencia de las constantes bajas, llegó a las filas del club capitalino un Tavares que ahora tiene 26. Pero estas edades no han hecho más que bajar en este verano. De las tres nuevas caras que se esperan, todas ellas están por debajo de los 26.

El Madrid baja la media

Quien pone este límite es Klemen Prepelic. El escolta esloveno tiene 25 años pero todavía tiene que despuntar al máximo nivel. Es un recambio perfecto para una posición que actualmente ocupa sin rival Carroll. Pero aún más joven es Gabriel Deck, cuyo referente se encuentra en un histórico como Nocioni. El argentino, a sus 23 años, está llamado a ser la próxima perla de su país. La guida la pondrá Pantzar. El sueco de 18 años será el tercer base y podría ocupar el hueco de Radoncic, que tiene casi cerrada la cesión a Burgos.