Carlos Alocén ante su gran oportunidad: su nivel en la fase final de la Liga puede convencer al madridismo

La fase final de la Liga Endesa puede suponer un antes y un después en la competición. Se trata de un evento único en unas circunstancias tan especiales como inimaginables. 12 clubes compiten por alzar el título partiendo con las mismas posibilidades.

Las sorpresas, que ya han existido, le aportan un matiz especial a la competitividad que casi siempre ofrece el baloncesto nacional. Y la presencia de todas las estrellas de la ACBbatiéndose en un duelo nunca antes probado, multiplica el éxito que está teniendo este nuevo formato.

Una de esas estrellas es Carlos Alocén, el base de Casademont Zaragoza, el equipo revelación de la temporada que ha empezado de la peor forma su andadura por el torneo de Valencia. Alocén es un proyecto de jugador de grandes dimensiones, de esos que, a pesar de corta edad, ya apuntan grandes maneras, que tiene la esencia de la élite en la sangre y que no se arruga en los grandes escenarios. Por ello, sus actuaciones en esta fase final están suponiendo lo mejor de un equipo que se encuentra ya contra las cuerdas tras solo dos jornadas.

Carlos Alocén, contra el Estudiantes EFE

Sin embargo, el nivel de Alocén no siempre ha sido el mismo. Su proyección parece innegable y es un hecho probado que se trata de la mayor promesa del baloncesto nacional, pero su rendimiento no ha terminado de despegar y esa continuidad que tienen las estrellas es la que le falta al base zaragozano.

Por ello, esta fase final se puede presentar como el momento clave para convencer a la que será su nueva afición, la del Real Madrid. El conjunto blanco cerró la contratación del joven ‘playmaker’ con la esperanza de tener entre sus filas al sucesor de los Llull, Campazzo y compañía. No obstante, la exigencia de un equipo del nivel del Madrid es máxima, y habrá que ver si Alocén está ya al nivel necesario para gestionarla.

Así juega Carlos Alocén

Alocén es un base particular. Con trazas de ser capaz de aportar en muchos aspectos, le falta un punto de constancia y madurez para ser decisivo con asiduidad. No destaca por su potencial anotador, pero tiene la capacidad y la calidad para aparecer en momentos críticos y aportar.

Además, está trabajando la fiabilidad de su lanzamiento, sobre todo de tres, y los resultados están siendo visibles. El acierto de cara al aro no es su mayor virtud, ya que se encuentra más cómodo aportando desde otros aspectos del juego.

Carlos Alocén, en un partido con el Basket Zaragoza. Foto: ACB

Sin embargo, es capaz de sumar cuando se encuentra inspirado y tiene una facilidad asombrosa para penetrar a canasta. Sus entradas al aro driblando a los mejores taponadores ya son famosas en la liga y tiene ese punto de espectacularidad que tanto gusta en la NBA. Prodigándose poco en ataque, es capaz de dejar siempre algún ‘highlight’ marca de la casa.

En esta fase final de la Liga Endesa se está destapando también como un hombre que puede llegar a liderar a sus equipos desde la anotación, tal y como hizo en su segundo partido contra Valencia Basket. En el duelo frente al equipo taronja fue el máximo anotador de su equipo con 14 puntos exhibiendo unos excelentes porcentajes en el lanzamiento con un 80% en tiros de dos y tan solo un triple fallado.

Además, repartió 4 asistencias y fue el jugador con mayor valoración de los zaragozanos en tan solo 19 minutos. En el primer encuentro contra San Pablo Burgos se prodigó menos en esta faceta con tan solo 8 puntos, aunque anotó dos lanzamientos desde la línea de tres, mostrándose cada vez más valiente en esta faceta.

Sin duda, su mejor apartado es el de asistente. Alocén tiene un ojo clínico para clavar pases imposibles. Sin ser un director de juego canónico, capaz de ser un metrónomo absoluto que marque a las mil maravillas el tempo del juego, sí tiene una capacidad pasmosa para enhebrar la aguja con pases de escándalo.

Carlos Alocén, contra Estudiantes EFE

Su habilidad para encontrar huecos donde nadie los ve y crear espacios que muchos ni imaginan es casi infinita. Y sin duda, se trata de una faceta que todavía tiene margen de mejora porque sus capacidades parecen ser altísimas.

De nuevo, tiene ese don de dejar imágenes para el recuerdo en forma de pases, de crear ese ‘highlight’ que crea afición a este deporte. Alocén es el base de los pases que enamoran, sobre todo en carrera. Es capaz de lanzar un contrataque sin que nadie en la pista se haya enterado. El genio frota la lámpara y la canasta de un compañero está hecha, puntos fáciles en la élite, algo impagable.

En sus dos partidos en esta fase final está promediando casi seis pases de canasta por partido, teniendo su tope con siete en el primer duelo ante San Pablo Burgos. Y algunas de esas asistencias han sido de una belleza y plasticidad mágicas, impregnadas con ese carácter de baloncesto espectáculo que tanto se suele ver en el Wizink Center cuando el Real Madrid activa el modo ‘parque de atracciones’.

El jugador zaragozano, si cumple con las expectativas y no se ve detenida su progresión, puede convertirse en uno de los mejores pasadores de Europa en poco tiempo, además de en uno de los más espectaculares.

Alocén intenta zafarse de Oriola ACBMEDIA

Otra de las grandes virtudes de Alocén es su capacidad para poder aportar en muchas facetas del juego, lo que hace de él un jugador completo. Es inteligente para saber colocarse y rebotear, y tiene la habilidad de incomodar a sus rivales realizando algún robo por partido.

Dar rienda suelta a sus virtudes y pulir algunos detalles como su capacidad para generar faltas del rival pueden hacer del base de Casademont un jugador de talla mundial. No hay que olvidar que solo tiene 19 años, aunque sea ya una referencia en la liga.

La temporada de Carlos Alocén

La temporada de Alocén ha sido una continuación de los mostrado hasta el momento. Una sucesión de luces y sombras que no permiten al joven terminar de confirmar su crecimiento o su explosión.

La calidad y las capacidades son indudables, pero ofrecer el talento a cuentagotas no es suficiente para ser garantía de éxito, y menos si se trata de llegar a la mejor plantilla del baloncesto europeo. Sin prodigarse mucho en la anotación, Carlos promedia 7 puntos por partido en los 24 encuentros que ha disputado, 15 de ellos partiendo desde el quinteto titular. Sus esfuerzos se han dosificado de gran manera, ya que solo promedia unos 20 minutos por partido, por lo que su margen de actuación también se reduce.

Más allá de sus datos en anotación, donde tiene unos buenos porcentajes con más del 53% de acierto en tiros de campo y un 33% en triples, el playmaker de 19 años muestra que es capaz de aparecer allí donde su equipo le necesita. Alocén suma su granito de arena en diferentes apartados, lo que termina siendo clave para ayudar a sus compañeros.

Carlos Alocén trata de marcharse de Blazic ACBMEDIA

El maño reparte más de 3 asistencias por partido, captura más de 2,5 rebotes y casi un robo por encuentro. El único apartado donde no muestra un nivel acorde a un jugador de su calidad es en el tiro libre, donde solo tiene unos porcentajes en torno al 60%, algo que sin duda deberá mejorar si quiere ganarse minutos en el cuadro de Pablo Laso.

Alocén presenta unos datos que no son especialmente llamativos a pesar de tratarse de uno de los mejores bases de la liga, especialmente si tenemos en cuenta su edad. No obstante, estas cifras podrían crecer exponencialmente si consigue dar ese salto que tanto se le demanda a un jugador que ya lleva varias temporadas dejando pinceladas de lo bueno que puede llegar a ser.

El riesgo de ser eterna promesa está ahí, pero sus topes en Liga Endesa, 19 puntos y 9 asistencias, permiten soñar con que el despegar del ‘cohete’ Alocén llegue pronto porque hay madera de gran jugador en sus 1,94 metros de altura.

Las posibilidades de Alocén en la fase final

Esta fase final de la Liga Endesa se presentaba como una gran oportunidad para Casademont Zaragoza, sin embargo, está siendo una gran pesadilla. El equipo revelación de las últimas temporadas, capaz de plantar cara a los dos grandes y situarse tercero en la clasificación de la fase regular por delante de otros históricos como Joventut, Valencia Basket o Baskonia, no está sabiendo afrontar un torneo de esta exigencia y sus resultados están cayendo muy por debajo de lo esperado. El conjunto zaragozano consiguió llegar el curso pasado hasta las semifinales, hito que esta temporada no podrá repetir salvo milagro.

Sin embargo, Carlos Alocén tiene otras motivaciones a título personal que lograr en lo que resta de fase final. Una vez perdido el objetivo del equipo, el base zaragozano tiene la difícil misión de seguir quemando etapas en su carrera, y una de ellas es la de brillar en un gran torneo.

Carlos Alocén se prepara para realizar un lanzamiento ACB

El joven jugador español tiene ante sí una oportunidad única de dejarse ver por todos aquellos que están estos días pendientes de la fase final de Valencia, especialmente los aficionados del Real Madrid que, en un muy poquito tiempo, serán los suyos.

Todo hace indicar que, ante un mercado tan complicado como lo será el de este verano, el equipo de Laso no hará grandes movimientos en su plantilla. Más allá de la salida de Mejri y las renovaciones anunciadas con la de Felipe en la recámara, el único movimiento podría ser la llegada de Alocén.

Si este hecho se produjera, el jugador de Casademont tiene una opción inmejorable de encandilar a la que será su nueva hinchada con actuaciones de méritos en lo que resta de fase final. Partidos como el realizado ante Valencia Basket y actuaciones que den que hablar sumarán puntos para su llegada a su nueva casa, la del equipo con más ambición y presión de Europa.

El reto, que no es sencillo, podría abrirle las puertas de la casa blanca de par en par y ofrecer el corazón de la grada del Wizink Center, que confía en ver en Carlos Alocén uno de los líderes que sustituya a una de las mejores generaciones de la historia del club.

Por ello, a pesar de que las posibilidades de Alocén podían haber sido las de liderar a la alternativa a los dos grandes de cara al título, rendirse no debe ser una opción para él, ya que puede tener en juego uno de los primeros grandes desafíos de toda su carrera, el llegar al Real Madrid mostrando su mejor cara ante los mejores jugadores de la liga.

Su hueco en el Real Madrid

La llegada de Carlos Alocén al Real Madrid no parece del todo segura a día de hoy. El hecho de que el club no vaya a hacer grandes esfuerzos este verano debido a la crisis del Covid-19 supone un punto a su favor, ya que sería un ‘fichaje’ a coste a cero debido a que ya pertenece al club.

Sin embargo, el overbooking en el puesto de bases podría ser grande y, si no hay salidas, el base zaragozano podría quedarse sin su taquilla en el vestuario merengue.

El Real Madrid cuenta ahora mismo con tres bases de primer nivel como son Facundo Campazzo, Sergio Llull y Nicolás Laprovittola. Llull es inamovible, Campazzo es una pieza fundamental y Laprovittola, a pesar de no haber rendido a su mejor nivel este curso, tiene un año más de contrato, un sueldo alto y las credenciales de haber sido el año pasado MVP de la fase regular de la liga. Ante este panorama, habría que barajar diferentes hipótesis que podrían hacer hueco a la joven promesa.

Laprovittola durante un partido con el Real Madrid ACB

La primera de ellas sería la salida de Laprovittola. El jugador argentino llegó el pasado verano al Real Madrid tras haber firmado la mejor temporada de su carrera en Joventut y tras haber sido plata en el Mundial junto a Campazzo y Deck.

Sin embargo, no ha terminado de pillar el ritmo del equipo y no se ha ganado la confianza de Pablo Laso. Los rumores de su salida han llegado a sonar en momentos de la temporada, pero las condiciones de su contrato dificultan su salida. Una vuelta a Joventut podría ser su destino más factible.

No obstante, Laprovittola también tiene en esta fase final una oportunidad para ganarse la continuidad y cerrar la puerta de Alocén. Su ritmo de juego más pausado y su necesidad de tener en sus manos el balón durante demasiado tiempo son los hándicaps que tiene el argentino en el conjunto madridista.

Estas posibilidades, que le permitieron brillar en Badalona donde era el líder y la referencia absoluta, no las puede mostrar en la capital de España, por lo que necesita reinventarse para que su talento aflore.

Hasta el momento, ha sido el tercer base del equipo, favorecido por las bajas de Llull, y no ha contado con muchos minutos a pesar de aportar, en algunas ocasiones, buenos porcentajes desde la línea de tres, capacidad para penetrar y buena conexión con los pívots, especialmente con Tavares.

Llull ayuda a Campazzo a levantarse en un partido del Real Madrid ACB

Otra de las posibilidades que tendría la llegada de Alocén sería la salida de Facundo Campazzo, sin duda mucho más traumática que la de Laprovittola. El mejor base de Europa está siendo seguido de cerca por varias franquicias de la NBA y su salida podría concretarse este verano, ya que el ‘playmaker’ albiceleste no ha llegado a cerrar la puerta de forma definitiva.

Los cantos de sirena de la mejor liga del mundo siguen estando presentes y, a pesar de que su agente ha dicho que no hay nada en concreto, ‘Facu’ solo quiere pensar en la liga y después estudiar su situación.

Sin embargo, la salida de un jugador de la talla de Campazzo podría impulsar al Real Madrid a intentar el fichaje de algún galáctico del baloncesto europeo que cubriera mejor esa plaza que la llegada de una joven promesa.

Además, las lesiones de Llull que no ha vuelto a mostrar su versión imparable desde que se dañara su rodilla, harían al club inclinarse por la opción de intentar traer a una estrella consagrada. En esta vía, la cúpula madridista ya tanteó a cracks del nivel de Larkin, Sloukas o Wilbekin.

Una de las vías que se le cerró al joven jugador zaragozano fue la salida de Jaycee Carroll, que podría haber motivado la permuta de Llull hacia el puesto de escolta y así abrirle un hueco.

Sin embargo, el ‘francotirador de Wyoming’ renovó por una temporada más y ese puesto queda cubierto con jugadores como Rudy o Causeur, además de la rotación de dos bases usada por Laso en ocasiones.

Alocén intentando anotar ACB

Así se presentan las opciones de Alocén para llegar a formar parte del actual campeón de Copa del Rey y Supercopa Endesa, un rompecabezas de infinitas combinaciones que empiezan por rendir al mejor nivel posible en esta fase final. Su aterrizaje en la capital de España pasa por convencer a Pablo Laso y a la hinchada merengue en la prestigiosa final de Valencia.

Además, un buen desempeño en un torneo que será seguido en todo el mundo permitirá agrandar su fama en la NBA justo unas semanas después de haber anunciado que no se inscribirá en el draft de este año.

De esta forma, Alocén apuesta por su crecimiento en Europa en detrimento de embarcarse en una difícil aventura como sería la de buscar un hueco en alguna plantilla americana, algo que llegará, si nada se tuerce, tarde o temprano, ya que el talento de Alocén y su estilo de juego encajan a la perfección con lo demandado por los expertos de la mejor liga del mundo.

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