1,92 metros de altura, con capacidad para regatear y con facilidad para oler el gol. Esas características resultan más que atractivas para cualquier ojeador y eso sucedió en la cantera del Real Madrid cuando en 2020 se lanzaron a por Álvaro Daniel Rodríguez. Todos le conocen por ser el hijo de 'Coquito' Rodríguez, un goleador uruguayo que triunfó en Sudamérica, pero no en Europa. Se instaló en Palamós y allí creció este delantero que ha debutado con el equipo blanco en la Youth League este miércoles.
El sueño del 'pequeño Coquito' se hizo realidad en verano de 2020. A sus 16 años llegaba al Real Madrid después de pasar cinco temporadas en Girona. Ahora como juvenil de segundo año empieza a acercarse a la élite del fútbol y ante el Sheriff Tiraspol, saliendo desde el banquillo, le dio muchos recursos al equipo de Hernán Pérez. Es un jugador hábil y rápido, por lo que puede jugar tanto de delantero centro como de extremo. Pero todavía destaca más por esa corpulencia y altura.
Su 1,92 metros es su característica que más llama la atención. Un futbolista zurdo, que acostumbra a jugar a pierna natural, y que ve portería con facilidad, dada su polivalencia y un físico privilegiado. Este miércoles se le vio más centrado ante la necesidad de buscar el gol. Fue una referencia para los centros y rozó el gol que finalmente marcaría Bruno Iglesias para darle el triunfo al juvenil del Real Madrid. También puede jugar por la banda derecha para encontrar su disparo a pierna natural.
Ahora busca mejorar la carrera de su padre. 'Coquito' llegó a España en la década de los 90, previo paso por el Rapid de Viena. Así acabó firmando por el Palamós, el cual por aquel entonces jugaba en Segunda División. Asentado en Cataluña, ahí se retiró y después ha ejercido como entrenador, incluso de su propio hijo. Ahora ve como, después de coger el AVE que le llevó a Madrid para abrir una nueva etapa, muy ilusionante, en Valdebebas, Álvaro empieza a tener presencia internacional.
Álvaro Daniel se formó en el Global Palamós para después jugar con el Gironès-Sàbat de ahí dio el salto al Girona, con el que jugó en la división de honor cadete. Está quemando etapas muy rápido y es cuestión de tiempo verle con el Castilla en el siguiente paso que tendrá quedar. Esta ni tan siquiera es su generación de Youth League, por lo que aún tiene un largo recorrido por recorrer. Su ambición, muy destacada en Valdebebas, tiene mucho que ver en este rápido crecimiento que está demostrando.
[Más información: Bruno Iglesias hace de salvador y el Real Madrid se jugará la Youth League en el Di Stéfano]