Tras la suspensión del Deportivo - Betis por el temporal todas las miradas están puestas en Balaídos y la visita del Real Madrid el próximo domingo. A las 23 horas de este viernes varias dotaciones de bomberos y policías de Vigo se tuvieron que trasladar hasta el estadio del Celta a causa del desprendimiento de una placa de la cubierta. Las fuertes rachas de viento han superado los 113 kilómetros por hora, aunque a pesar de ello el partido entre el líder y el equipo de Berizzo no corre peligro.
La placa se soltó de la grada Río Alto, donde se suele ubicar la afición rival, y no se han tenido que lamentar ni daños físicos ni materiales. Se teme que este sábado el estadio vigués sufra más daños, aunque en un principio la situación se encuentra controlada. El Real Madrid viajará el mismo día del partido debido a las condiciones metereológicas adversas.