Gianluigi Donnarumma no solo es el portero con mayor proyección de Europa, sino también la última joya de Mino Raiola. El agente italiano ve en el guardameta a su nueva gallina de los huevos de oro y ha puesto en marcha la maquinaria para llevar a la joven promesa, ya convertida en realidad, a uno de los grandes clubes europeos. En el Real Madrid gusta mucho el jugador del Milan pero tienen claro que no llegará a la capital de España con Raiola como representante. Tras las negociaciones por Pogba del pasado verano, el club blanco se volvió a sentir muy decepcionado por sus formas y su afición por aparecer en los medios de comunicación.
LA MALA EXPERIENCIA POR POGBA
Raiola no ha dudado en los últimos meses en subir la cotización de Donnarumma afirmando que "será el primer portero por el que se pagará más de 100 millones de euros". Unas declaraciones que son determinantes para que en el Bernabéu se olviden del italiano. El Real Madrid intentó normalizar relaciones con Raiola para el fichaje de Pogba, que fue una petición de Zidane, pero el agente no cambió su forma de actuar ni de negociar pidiendo unas comisiones que están fuera de los precios de mercado. Al final, el traspaso del internacional francés superó, por mucho, lo pagado en su momento por futbolistas más consolidados como Bale o Cristiano.
El Milan intenta retener por todos los medios a Donnarumma, aunque Raiola utilizará tanto la oferta del conjunto rossonero como el interés de numerosos clubes para disparar el sueldo de su representado. Este mes de febrero el guardameta cumplirá la mayoría de edad y al lado del excéntrico agente se asegura un buen contrato y quizá un futuro lleno de traspasos como ha pasado a lo largo de los años con todos los jugadores que han dejado su futuro en manos de Mino Raiola.